Otro giro dio la tan hablada autopsia al cuerpo de Carlos Barrios, la persona que fuera mortalmente herida a las 0.30 horas cuando había ido a guardar la camioneta Honda en la cochera que alquilaba en Ferrería y Rivera de Mercedes, y cuando iba a retirarse apareció quien le disparó al menos una vez, causándole heridas internas que determinaron su fallecimiento poco después cuando era atendido en Hospital Mercedes.
La primera información que la propia Policía manejaba porque surgía desde el centro de salud, era que había recibido tres disparos de arma de fuego, uno en la cabeza, otro el pecho y un tercero en el brazo.
Ello se mantuvo hasta que se efectuó la autopsia en Mercedes, de la cual, si bien el informe es reservado y va directamente a la Fiscalía, trascendió que solamente tendría un disparo en la zona del abdomen con una trayectoria que podría ser desde abajo hacia arriba, alojándose el proyectil en zona lumbar, prácticamente entre las vértebras, lo que dificultó su ubicación y extracción.
También allí se habría comprobado traumatismo de cráneo con importante hematoma orbitario en la zona izquierda, a su vez presentaría fractura de nariz y como adelantara @gesor, fracturas en ambos brazos que podrían haber sido pisados y hecho palanca con ellos y el motivo de la muerte habría sido una hemorragia interna.
Pero el hecho que no se hubiera podido extraer el proyectil y la diferencia entre lo que se manejó inicialmente en cuanto a tres impactos y que según esta autopsia sería uno el disparo recibido, hizo que la Fiscal determinara el envío del cuerpo al Instituto Técnico Forense (ITF), para que se le practicara allá una autopsia con mayor tecnología y mejores elementos y herramientas.
Sin embargo pasaron las horas y ayer se tomó conocimiento que el ITF no practicaría una nueva autopsia, inclusive trascendió que se había pedido que viajara el forense local para efectuarla allá, pero eso no ocurrió y en la noche de este lunes el cuerpo estaba regresando a Mercedes para que se le extrajera el proyectil acá.
En el ITF se habrían practicado análisis de sangre, radiografías y utilizando un detector de metales, habrían ratificado que solamente existiría un proyectil en el cuerpo, coincidiendo en la autopsia inicial.
Se aguarda ahora la extracción del proyectil y el posterior análisis de éste, para poder conocer detalles del arma utilizada.