Un litigio judicial amenaza no sólo con la nulidad de compromisos de compraventas realizados, según los denunciantes en condiciones irregulares, sino que paralelamente podrían determinar responsabilidades penales para dos personas que han sido denunciadas en ese ámbito, una de ellas de profesión Escribano Público, y otra viuda de conocido y apreciado profesional que según quienes denuncian habría utilizado documentación de éste en su beneficio personal.
El caso tiene una parte que está sustanciándose en el Juzgado Letrado de Primera Instancia de Mercedes de Tercer Turno, a cargo de la Dra. Pura Book y sobre el tema, @gesor dialogó con el profesional que lleva adelante las denuncias, en nombre de su cliente, quien se siente afectado patrimonial y personalmente.
El Dr. Víctor Gil Barrera ante nuestra consulta confirmó que ha solicitado "la declaración de nulidad de lo actuado respecto de las compraventas que justifican la personería jurídica de los actores", añadiendo que lo hizo entendiendo que existe "falta de legitimación activa".
Cuando le solicitamos que explicara algunos detalles más del caso, el Dr. Gil Barrera dijo que se trata "del negocio llevado adelante contra los intereses de mi cliente, por bien inmueble, por una señora que nunca fue propietaria del inmueble y tampoco pudo transferir la posesión de la cuota parte no incluida en la compraventa, porque nunca tuvo la posesión del inmueble, ya que mi representado nació y vivió allí toda su vida".
El Dr. Gil Barrera, además hizo referencia a otras situaciones, "el padre de mi representado, murió ciego el 27/8/2013 y la madre de mi representado no sabía leer ni escribir y falleció padeciendo demencia senil el 6/4/2013, nunca vendieron la chacra de la zona de Cerro Alegre ni recibieron por ella ningún precio".
Para el Dr. Gil Barrera, la mujer denunciada, viuda de conocido y apreciado Notario, "utilizó papeles que tenía el escribano en su escritorio para fraguar una venta, lo que deberá elevarse a la Justicia Penal" y a su vez, el Dr. Gil Barrera añadió, "no es posible que el Escribano (también denunciado en esta ocasión, no el fallecido), haya realizado una escritura de compraventa el 10 de enero 2017 y haberla inscripto el 16 de enero del 2017, cuando las personas mencionadas fallecieron el 6 de abril del 2013 y el 27 de agosto de 2013 como lo prueban los certificados de defunción, por lo que la actuación de este Escribano Público también debe remitirse a la Justicia Penal".
Por estos aspectos que el abogado viene enumerando es que considera "obvio que los actores no tienen ningún derecho sobre el inmueble y por lo tanto todo lo actuado debe ser declarado nulo, sin perjuicio de las denuncias penales que se dejan formuladas contra esta mujer, que utilizó la documentación y contra el Escribano Público".
El Dr. Gil Barrera concluyó el diálogo con @gesor señalando, "estamos ante un caso de nulidad absoluta, la cual puede peticionarse en cualquier momento, sin plazos ni etapas procesales. Aquí hubo delito, a mi representado lo robaron y quieren seguir robándolo".