Este martes 15 a las 16.00 horas se inaugura el Espacio Memorial Penal de Libertad.
El acto contará con la presencia del Presidente Tabaré Vázquez y otras autoridades nacionales, departamentales y municipales.
El Memorial se erige en el km 52,500 de la Ruta 1, en la intersección con la Ruta 90, departamento de San José, en la bifurcación que conduce hasta el Penal de Libertad.
Es el mismo lugar hasta el cual podían llegar los ómnibus y vehículos que conducían a los familiares que iban a visitar a sus presos durante el período dictatorial.
El espacio homenajea a los miles de ciudadanos que fueron recluidos en el Penal de Libertad durante la dictadura, a quienes fallecieron en el establecimiento y muy especialmente, a los familiares que también fueron víctimas del terrorismo de Estado y concurrían a las visitas.
La iniciativa fue un emprendimiento conjunto de Crysol (Asociación de Ex presos políticos de Uruguay), de un grupo de ciudadanos de Libertad, del Ministerio de Educación y Cultura (MEC), del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) con el apoyo del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
Para concretar la iniciativa, Crysol firmó un convenio con el Ministerio de Transporte y Obras Públicas y gestionó la ejecución del proyecto.
El diseño del Memorial fue resultado de un concurso público. Se llevó a cabo durante 2016. En el mismo resultó ganador el proyecto de los arquitectos Raquel Lejtreger y Javier Olascoaga. Ambos son hijos de presos políticos que estuvieron en ese establecimiento de reclusión y ellos se conocieron, además, durante las visitas a sus padres siendo adolescentes.
En función de su ubicación, en un cruce de rutas y con un entorno rural, responde a dos modalidades de percepción: la de quienes pasan en vehículo por la ruta y la de las personas que concurren al sitio.
El espacio se articula en base a tres componentes que recorren estas dos percepciones, la puerta con la mirilla, el banco y el camino.
Una gran puerta abierta con la mirilla desde la que se puede ver un recorte de cielo, sintetiza un futuro real que comienza en el umbral, con la memoria del futuro deseado.
La austeridad del hormigón, utilizada en las construcciones de las cárceles, es reinterpretada como material de resistencia.
A 33 años del retorno a la institucionalidad democrática, la inauguración del Memorial es un homenaje a los miles de ciudadanos que sin garantías de ningún tipo fueron condenados por la Justicia Militar y recluidos en condiciones inhumanas y degradantes.
Homenajea a quienes vieron violentados sus derechos por luchar por la libertad y la democracia. Sin una mirada nostálgica, este Espacio es un recordatorio permanente de una gran lección: el desconocimiento y el menosprecio de los Derechos Humanos han originado actos de barbarie ultrajantes para la conciencia de la humanidad, también en nuestro país.
Es también un compromiso militante del Estado y de la sociedad civil para evitar que hechos de esta naturaleza vuelvan a reiterarse. Es un llamado permanente a la reflexión y también una convocatoria a la justicia plena: única garantía de que hechos de esta naturaleza no vuelvan a repetirse.