"Tres entonces jóvenes oficiales: Alberto Ballestrino, hijo del general del mismo nombre, Gustavo Mieres Ultra y Daniel Blanco Fanocchio, ambos recién egresados de la Escuela de las América (School of America, SOA), fueron quienes en el Regimiento de Caballería Nº 2 de Durazno, el 24 de mayo de 1973, un mes antes del golpe de Estado, mataron en la tortura a Oscar Fernández Mendieta, según una investigación realizada por La República", comenzaba señalando aquella nota del colega capitalino del 25 de enero 2009, tras haber logrado que rompiera el silencio un exsoldado testigo de lo ocurrido, y para lo cual el colega y algunas otras personas habían viajado desde Mercedes donde se armó expedición, rumbo a Durazno, el sábado 10 de enero 2009.
Con el dato reunido por familiar de Fernández Mendieta, el periodista de La República entabló contacto con militantes de DDHH de Mercedes y como forma de justificar la presencia del periodista, se armó una charla en la sede del Plenario Interinsical de Soriano, pero el objetivo era el viaje a Durazno, a entrevistarse con el exsoldado que estaba dispuesto a hablar pero que no quería saber nada con la prensa. De todas maneras el colega con su experiencia en esta labor partió acompañado de una persona que llegó desde Montevideo, un militante de Mercedes y un sindicalista también luchador por los DDHH al volante del vehículo.
"Llegamos al lugar en las afueras de Durazno donde el hombre tenía un bolichito, salió y lo saludamos, el periodista se acercó y le extiende la mano diciéndose Fulano de Tal de La República. El hombre lanzó una puteada tremenda, dio media vuelta e ingresó de nuevo al boliche. Dijimos, este hombre no vuelve más. Cuando sale nos dice que no quiere saber nada con la prensa, que no va a testificar, y el periodista, desde el bolsillo de su saco extrae un grabador y le dice "tomé le doy garantías, hable tranquilo que no lo voy a grabar" y a partir de ahí el hombre comenzó a contar", dijo este jueves uno de los participantes de la expedición a @gesor.
LO QUE DIJO EL EXSOLDADO
En la nota de La República, "el testigo comienza a dibujar aquel Durazno de 1973, tan lejano en el espacio y en el tiempo. “Hay otros que saben, pero alguno hasta está emparentado con la familia del muerto. En Durazno no hay otra cosa. O vas al cuartel o vas a la base. Todos son milico, esposa de milico, hijo de milico o padre de milico. Hacés un peso si salís de misión. Si no, esperar, jubilarte, ganar una mierda y vivir de changa…”, se desahoga.
Lentamente, el ex soldado acepta situarse en aquellos días previos al golpe de Estado. Algunas veces se había detenido gente por “eso de la subversión”, quizás se había torturado, pero muertos no. El Regimiento de Caballería Mecanizada Nº 2 “Gral. Pablo Galarza” no había tenido hasta aquel día de mayo una historia tan oscura, una vergüenza que se tuvo que ocultar dentro de la propia fuerza y del sistema político que todavía regía.
Finalmente habla: “Núñez lo fue a buscar. Lo trajo de la chacra donde vivían los Fernández Mendieta. Lo llevó al cuartel. Al sótano. Había agua en el piso. Le dio la biaba y se fue, pero había quedado bien… Después vinieron los otros. Eran muy jóvenes. Ballestrino, el hijo del general, Mieres y Blanco. Le dieron la máquina y se les fue. No sabían hacerlo. Se asustaron. Lo subieron a la enfermería. Blanco le hizo respiración boca a boca… Ya estaba muerto…”.
Hace silencio. Cierra la charla con un resignado gesto de “es todo”… un “ya está” que acentúa con la manos, la boca y las cejas. Hay angustia en su garganta. En sólo ochenta palabras, que pronunció en menos de 30 segundos, el ex soldado había derribado un muro de complicidad que por más de 35 años había mantenido la verdad aplastada por la impunidad. Fernández Mendieta fue muerto en la tortura. Tres oficiales son los responsables. Ahora se sabe".
ESTE JUEVES, EL FISCAL PERCIBALLE PIDIO LOS PROCESAMIENTOS
El Fiscal de Derechos Humanos Ricardo Perciballe solicitó el procesamiento con prisión de cuatro militares retirados por el homicidio por torturas de Oscar Fernández Mendieta, un militante del Partido Comunista Revolucionario ocurrido el 24 de mayo de 1973, según comunicó este jueves en su página web la Fiscalía General de la Nación, indicó el portal Ecos.
A dos de ellos, Daniel Blanco y Gustavo Mieres, les imputó la autoría de un delito de homicidio “muy especialmente agravado”. Lo mismo le tipificó a Alberto Ballestrino, a quien le agregó abuso de autoridad. A Líber Molinelli la solicitud de procesamiento fue por coautoría de homicidio más dos delitos de privación de libertad y dos de abuso de autoridad.
Según indica el pedido de procesamiento, Fernández Mendieta, un trabajador rural de 26 años, fue detenido por oficiales del Batallón de Caballería Blindada de Durazno ese día de mayo, poco más de un mes antes de la disolución de las Cámaras y el Golpe de Estado. Mieres y Ballestrino fueron quienes lo aprehendieron, bajo las órdenes de Molinelli.
¿QUIEN ES GUSTAVO MIERES ULTRA?
Gustavo Mieres Ultra uno de los militares para los cuales se pide el procesamiento por parte del Fiscal Perciballe, es mercedario, egresado de la generación 1972 de la Escuela de las Américas, la primera que egresara de la Escuela de Toledo, habiendo participado del curso "Internal Security Opns CC-6" entre el 10 de enero y el 3 de febrero de 1972 en Panamá" en la Escuela de las Américas.
Es integrante de una familia que también sufrió la crueldad del terrorismo de Etado y el Plan Cóndor, un hermano de Gustavo Mieres Ultra, Jorge, "El Mono", apreciado maestro de escuela, fue torturado durante la dictadura militar, preso político. Restituido años después, hoy sigue ejerciendo como maestro y docente en el programa de Educación en Contexto de Encierro, o sea dando clases a las personas privadas de libertad. Mieres Ultra también tiene dos hermanas que residen en Mercedes.
Gustavo Mieres Ultra, ha estado durante años vinculado al deporte en especial al fútbol, siendo Presidente de la Liga de Fútbol de Tacuarembó durante años, también del Tacuarembó F.C. (fotografía de elmuertoquehabla.blogspot.com)
Ajuntamos el dictamen del Fiscal Perciballe
ojala se haga justicia