El equipo de Once Corazones le ganó 3 a 2 a Barrio Nuevo, jugando un buen partido, lo perdía y lo dio vuelta, lo manejaba con tranquilidad y terminó siendo una victoria apretada por las ganas y el ímpetu que los del barrio Treinta y Tres, le pusieron casi el final.
El Once no la paso del todo bien en la defensa, porque tuvo problemas para controlar la presión a veces sin precisión que Ricardo Vázquez en especial le generaba a los defensas centrales, pero tuvo un buen trabajo del medios campo y una importante gravitación ofensiva que le permitió manejar con cierta tranquilidad el trámite del juego, aun cuando estaba en desventaja. Tuvo a un Marcelo Castro que apareció con precisas habilitaciones en tres oportunidades para ceder las jugadas que terminaron siendo los goles de su equipo.
Barrio Nuevo en su segunda llegada se puso en ventaja a los 16’ por medio de Orlando Seiler. En el minuto 21, un tiro libre bien ejecutado por Marcelo Castro casi al centro del área le posibilitó a Enzo Polero de cabeza, empatar el juego en 1 gol. Pero la defensa del once no la pasaba bien cuando Vázquez presionaba denunciaba fallas. Pero decíamos de un buen trabajo de mitad de cancha hacia adelante y fue que en el final del primer tiempo Washington Aquino la empezó poco más adelante de la línea que al terreno divide en dos, combinó con Marcelo Castro que la devolvió a Aquino por derecha, llegando al fondo cediendo al medio para Alejandro cabrera que puso el 2 a1 dando vuelta el marcador cuándo llegaba el final del primer tiempo.
En el complemento a los 53’ de juego otra muy buena habilitación de Marcelo Castro para Washington Aquino puso el 3 a 1 y el barrio no jugaba bien, era superado tenía el plus de poder aprovechar los desajustes de la defensa de Once Corazones, pero que con el paso de los minutos se fue afirmando. Barrio Nuevo lo intentaba por todos lados no fue el mejor partido del equipo azul pero tuvo rebeldía, amor propio y sin ideas intentaba complicar al equipo de Crespo que mostró un sólido trabajo en la mitad de cancha y poco a poco buscó en la habilitación en largo a sus atacantes la fórmula para cerrar el juego.
No fue fácil, Barrio Nuevo se había apoderado de la pelota y cada vez lo encerraba más a Once Corazones, que la última media hora la jugó con un futbolista de menos por expulsión de Alejandro Cabrera denunciado por el juez de línea Julio Trujillo.
A 6 minutos del final, el arquero Carlos Barbárov le cometió penal a Nicolás Rodríguez que había ingresado en el complemento bien cobrado por César Arrúe, lo remató Ricardo Vázquez que puso el 3 a 2.
El resto, más el tiempo de recuperación fue todo de Barrio Nuevo, reitero sin mucha claridad, pero dejando claros para el contragolpe que en más de una oportunidad intentó aprovechar, Once Corazones.
Lo que era una victoria cómoda terminó siendo apretada, pero muy merecida al fin, por el buen juego desplegado por el ganador, sobre una mala tarde del equipo azul donde en los 10’ finales con más amor propio que ideas, salió a buscar el resultado.
Detalles:
Parque Chick.
Árbitros: César Arrúe –Mauricio Simaldoni-Julio Trujillo.
Once Corazones (3): Carlos Barbárov, Esteban Callorda, Maximiliano González, Enzo Polero, Diego Bayuré, Alejandro Merello (78´ Matías Barrios), Washington Aquino (90+ 5´ Gustavo Silva), Alejandro Cabrera, Julio Martínez, Alejandro Cabrera, Marcelo Castro (81’Sebastián Morales) DT. Carlos Crespo.
Goles: 21 y 53’ Washington Aquino y 44’ Alejandro Cabrera.
Tarjetas amarillas: Diego Bayuré, Alejandro Merello, Carlos Barbárov, Julio Martínez, Alejandro Cabrera, Marcelo Castro, Pablo Muela.
Expulsados: 62’ Alejandro Cabrera.
Barrio Nuevo (2) Washington Colmán, Pablo Carrizo, Fernando Benedetti, Jonathan Méndez (70’ Juan Salvatierra), Pedro Perillo, Renzo real, Franco Fascini, Gustavo Barrios, Orlando Seiler (63’ Matías Blanco), Ricardo Vázquez, Waldemar Pereira (58’ Nicolás Rodríguez). D.T. Gonzalo Aboal.
Goles: 16’ Orlando Seiler, 84’ Ricardo Vázquez de penal.
Tarjetas amarillas: Franco Fascini Fernando Benedetti, Gustavo Barrios.
Expulsados: 90+5 Franco Fascini.
