Nica Rivas y Luis Arijón leyeron la proclama del Plenario Intersindical de Soriano en adhesión al día internacional de la mujer trabajadora.
El PIT CNT en conmemoración del 8 de marzo, Día internacional de la mujer trabajadora
En el día de hoy recordamos el origen obrerista de la fecha que sin dudas tiene.
Las luchas y manifestaciones, los paros y movilizaciones, que en ocasiones supusieron la pérdida de vidas de cientos de mujeres, marcaron con sangre esta conmemoración.
Las protestas a lo largo de los años, en una fecha que se fue construyendo como un proceso tenían como puntos cuestiones tan variadas como el rechazo a las miserables condiciones de trabajo, reclamar por el derecho al voto y a ocupar cargos públicos, a la enseñanza, al trabajo y al fin de la discriminación laboral, la exigencia del recorte del horario laboral, la solicitud de mejores salarios, y el fin del trabajo infantil, entre otros.
La elección del 8 como fecha definitiva de celebración de este día proviene de Rusia y se debe a una sublevación de mujeres contra la guerra, que fue el prolegómeno de la Revolución bolchevique. El 8 de marzo de 1917 las mujeres rusas se amotinaron ante la falta de alimentos, dando inicio al proceso revolucionario que acabaría en el mes de octubre de ese mismo año con la caída del régimen zarista.
Hoy, en Uruguay queremos recordar también a las mujeres uruguayas de la resistencia a la dictadura que convocaron a una marcha que fue prohibida y reprimida.
A las que fueron parte de la reorganización de los sindicatos y de las protestas en los barrios.
A las cientos de trabajadoras y estudiantes que sufrieron la cárcel y el exilio.
A las mujeres desaparecidas.
A las que salieron a la calle a denunciar la violencia y hacer visible las desigualdades.
A las que igual que nosotras queremos un mundo más justo y más solidario, una vida digna para todas y todos.
Queremos hacer juntos este 8 de marzo un día de movilización, generando encuentros, espacios de reflexión, de memoria, espacios que nos ayuden a ver la razón de ser de la violencia, de la falta de oportunidades, de la discriminación, de la carga del trabajo doméstico y saliendo a las calles a hacer sonar nuestra voces de denuncias y de propuestas.
Nos queremos libres, sanas, felices, sin miedos.
Y queremos a nuestros hermanos luchando junto a nosotros.
VIVA EL 8 DE MARZO DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER TRABAJADORA.