Tal lo que se desprendió de la audiencia realizada en la Dinatra entre el gremio y el síndico. Esta instancia fue fundamental para los trabajadores doloreños ya que 80 mantendrán su fuente laboral, en tanto los 20 restantes optaron por el despido.
La venta de Molino Dolores venía negociándose desde los últimos meses de 2017 con diferentes alternativas donde el sindicato pretendía, además de conservar la fuente laboral, que se les respetara la prima por antigüedad a los trabajadores. Oscar Muniz delegado sindical explicó a @gesor que esta prima por antigüedad para los trabajadores con varios años de trabajo significa un porcentaje importante del sueldo. En el acta firmada en la Dinatra se acordaron los términos donde la empresa compradora tendrá dos años para negociar esa prima por antigüedad de los trabajadores. “Es computable, no la perdemos” comentó Muñiz.