El femicida de la joven M.N.B.D. de 32 años, que muriera en la madrugada de este domingo víctima de disparo en la cara realizado por M.A.M.O. de 61 años con quien mantenía relación de amantes, según aceptara el hombre ante los investigadores, se desempeñaba como transportista, aunque debido a algunos problemas de salud, había tenido un impasse y posteriormente retomado las actividades. Durante años vivió en Palmitas, integrante de una reconocida y apreciada familia trabajadora, que hace tiempo se trasladó a Mercedes, la señora realiza tareas domésticas en diferentes fincas, siendo muy apreciada, al igual que sus hijos ya mayores en distintos trabajos. Fuentes allegadas a la familia hablaron de la sorpresa que les causó conocer la doble vida que llevaría esta persona "y el engaño que significó para la propia señora que durante los problemas de salud que tuvo, siempre lo cuidó y estuvo a su lado", expresaron.
Ello sin perder de vista y como primeras víctimas a la propia joven y a los dos hijos de la madre que muere nuevamente a manos de un hombre y por su sola condición de ser mujer, algo que nos sigue interpelando como sociedad. Y a propósito de ello, también llamamos a la responsabilidad a la hora de brindar información porque el brindar el nombre de la joven en estas circunstancias significa revictimizarla a ella y a sus hijos en una sociedad pequeña como la de Dolores y a una familia que ya sufre algo inenarrable para agregarle la estigmatización.
Fotografía: Juzgado de Dolores donde se realizará la audiencia de formalización