La Directora de la Unidad de Atención a Víctimas y Testigos de la Fiscalía General de la Nación, Mag. T.S. Mariela Solari hizo referencia a los principales objetivos de la creación de esta Unidad, "por un lado el paradigma del cambio cultural de las prácticas en administración de la Justicia, lo otro tiene que ver con empoderar a las víctimas en su rol y esto es algo bastante más complejo. En general no tenemos mucha cultura de participación, pero además participar y asumir el conflicto penal y transitarlo por un ambiente que hasta ahora ha sido hostil, va a ser todo un camino que quienes estamos cerca de la gente podrá acompañarla en ese derecho que tienen y que va a requerir, no llevarla de la mano y no obligarla y no que hagan lo que queremos que hagan, si no que tienen esa oportunidad y ese derecho".
Asimismo se apunta a "visibilizar los efectos del delito en las víctimas, sus familiares y el entorno. Esto tiene que ver con el efecto que se genera en el entorno de las víctimas o en las comunidades, y que no siempre ese dolor, ese miedo y eso que transita, es trabajado. Como podemos generar sinergias con otros actores para poder trabajar esas cosas. La Fiscalía puesta a disposición para todo lo que tiene que ver con la información, incluso para trabajar algunas cosas a nivel comunitario desde la Unidad de Víctimas, pero debemos visibilizar eso también porque en este cambio cultural, es importante que eso también pueda tomarse".
Igualmente la apuesta es a "identificar los grados de vulnerabilidad y victimización que generan los distintos tipos de delitos y la respuesta para cada tipo de víctima. Muchas veces podemos estar trabajando en un CAIF y a la mamá de un niño la rapiñaron, tenemos que saber que el efecto de la rapiña impacta en el niño. O trabajamos en una escuela o liceo y ya van dos mujeres que murieron por violencia doméstica, madres de alumnos de liceo. O coparon y mataron a alguien en una casa a dos cuadras de la institución donde trabajamos haciendo recreación. Cómo podemos empezar a introducir esos temas para que también se puedan trabajar".
Otro aspecto es el de "fortalecer respuestas de atención y protección a las víctimas y testigos, y aquí vamos a tener ausencias sobre la mesa en esta materia, y esas ausencias que nos queden tenemos que buscar la forma de tramitarlas, pero no de enojarnos entre los servicios, que a veces no están pensados para este tipo de respuestas. Por ejemplo, hay víctimas a las que habrá que ir a la casa porque no van a salir de ella, habrá que tener modelos flexibles para algunas respuestas porque si es el mismo chiquilín con el que trabajo en el liceo y a la mamá la rapiñaron y al chiquilín le vino un ataque de pánico que no quiere salir a ningún lado, no puedo esperar en el liceo que venga, porque no va a venir y capaz que fue a atenderse a la salud y fue atendido por un ataque de pánico pero nunca se asoció con lo que le pasó a la mamá. A eso me refiero con poder visibilizar ese tipo de impactos".
Lo otro a lo que hizo referencia, es la "articulación de la red de servicios a nivel local, no es lo mismo decir esto hoy que hace 15 años atrás, hemos tenido avances en la participación de los fiscales. Y lo otro son las instituciones del Estado, pero que depende en cada localidad de las organizaciones de la sociedad civil que trabajan y participan del proceso junto con el Estado, también son parte del entramado de la red más local".