Inspira canciones, películas, obras de arte. Consigue hacernos felices, pero también nos sumerge en la melancolía. Tiene su cara A y su cara B y, ante él, se desarrollan actitudes tan distintas como quienes se arrojan a sus brazos sin miedo, quienes andan con pies de plomo y quienes se cierran porque dicen no creer. Hablamos, claro, del amor.
Los románticos dirán que es el amor lo que mueve el mundo, sea por otra persona, sea por ideales, sea por una causa que se considera justa. Los realistas-pesimistas, se mostrarán convencidos de que el motor principal es el dinero. Desde luego, las tensiones y conflictos alrededor del mundo conducen a pensar en ello.
El amor ha sido en muchas ocasiones objeto de estudio de la ciencia. Investigadores alrededor del mundo se han interesado por conocer, entre otras cosas, las fases por las que atraviesa una relación de pareja, ya que el momento en el que se encuentre delimita mucho el comportamiento de cada componente. ¿Cuáles son las fases del amor?
El enamoramiento, la etapa más pasional
En esta primera etapa, la pareja se deja llevar por la pasión, y no por la razón. Se desean, buscan constantemente el contacto sexual, no dejan de pensar en el otro. Y esto, por supuesto, tiene una explicación científica. Saber que todo es fruto de un proceso químico que tiene lugar en nuestro cerebro hace que todo pierda encanto, pero así es.
Por una parte, se producen estrógenos femeninos y andrógenos masculinos, los que hacen que aumente la libido. A ello ayuda también la feniletilamina, otra sustancia producida por el cerebro.
Por otra, durante el sexo se libera oxitocino y vasopresina, hormonas que contribuyen a esa conexión entre los miembros de la pareja. La serotonina, que estabiliza el humor, y ciertas regiones del cerebro quedan retraídas, lo que explica eso de pasión y no razón.
Esto se puede apreciar claramente en las redes sociales. Es muy común encontrarnos en el muro de Facebook muchas imágenes con reflexiones, frases y citas. Incluso hay muchos grupos de esa red social que se dedican exclusivamente a publicar frases de la vida para reflexionar y pensar u otras más románticas y sobre amor. Las declaraciones de amor en público ahora son más fáciles de hacer que nunca: solo necesitas acceso a tu cuenta de Facebook.
Euforia en la fase romántica
¿Es sentir ese amor romántico que caracteriza a los inicios de la relación una necesidad que tiene el ser humano? ¿Como lo es comer, beber o sentirse protegido? Hay estudios científicos que indican que así es.
Un estudio de bioquímica realizado en el seno de la Universidad Rutgers, en Nueva Jersey, observó que las células de una persona enamorada sintetizan más dopamina, un neurotransmisor relacionado con la euforia o la motivación. Aumentan las funciones en el tegmental ventral, una región del conocido como cerebro reptiliano, en el que se localizan las conductas básicas de supervivencia. Por si fuera poco, la norepinefrina contribuye a ese comportamiento, a veces, obsesivo. Y la serotonina sigue inhibida.
Nacer, crecer, reproducirse y morir es el ciclo de todo ser vivo. Parece que el cerebro está intentado todo lo posible para cumplir con la tercera fase. Lo cierto es que puede implicar cierto peligro, porque no actuar con raciocinio puede cegar a la hora de identificar relaciones tóxicas.
Cuando no se ve, alguien tiene que dar pistas de que esa relación no es la que más conviene. Ayuda saber qué se puede considerar una Pareja Feliz, qué es ese amor de pareja sano que debe ser alimento de los enamorados.
Compromiso, el amor avanza
Después de tanta intensidad, el enamorado merece un respiro. El deseo se mantendrá, sí, pero la pasión se bajará poco a poco hasta ser más relajada. Y, por aquello de no estar desmedida, será también más consistente.
Se abre así la etapa de la lealtad. Las primeras peleas de pareja habrán quedado atrás (aunque no se descartan las de convivencia, claro). Sigue el juego de endorfinas y encefalina, que promueven esa relajación y bienestar.
Eso sí, ambas también tiene un papel relevante en la adicción. Llegados a este punto de la relación, se tiene miedo a perder a ese ser querido.
Sosiego en el amor compañero
Si la pareja logra superar todos los conflictos y llegar a este punto de la relación de pareja, su amor se seguirá cocinando, pero a fuego lento. Nada de la ebullición de esa etapa romántica, donde la libido estaba por las nubes. Es más probable que se caiga en la rutina, y eso también tiene que ver con un proceso bioquimíco: se libera menos dopamina y, en caso de que se reduzca el contacto sexual, sucederá lo mismo con la oxitocina.
Sin embargo, si la pareja ha alcanzado tal fase en su relación, es porque, probablemente, su compromiso es sólido. Sus miembros suelen tener un proyecto en común que incluye el cuidado de los hijos, por lo que se ha completado su función como especie.
Cuando no es posible continuar con la relación, habrá que contemplar una ruptura que no resulte traumática ni para los miembros de la pareja ni para su familia. El divorcio express es una opción que se contempla en algunos países, como España, y desde Madrid, un abogado matrimonialista explica de qué se trata.
Por muy mal que vaya la relación, por más que convenga cortar por lo sano, los sentimientos y la historia que ha compartido la pareja pueden deparar una ruptura dolorosa. Los psicólogos están para ayudarte, especialmente si se trata de psicólogos expertos en relaciones de pareja como los que están detrás de www.enmadridpsicologos.com.
“La familia es un sistema donde cada cambio, ya sea positivo o negativo, afecta directamente al resto de miembros”, explican desde su web. Por eso, tratan las dificultades en la comunicación, los problemas de la convivencia, los celos, el manejo de situaciones problemáticas, la separación o divorcio, la infidelidad o el refuerzo de conductas positivas.
El seguimiento de una terapia a cargo de un experto, por tanto, puede ser de mucha utilidad.