En el marco de la Operación RAIN (lluvia en inglés debido a que el día que se llevó a cabo las precipitaciones eran importantes), la Justicia de Mercedes determinó nuevos procesamientos que se suman a los cinco con prisión determinados en la noche del lunes que informamos por separado, este martes, el magistrado a cargo de la sede penal proceso con prisión a Rodolfo Ariel Sena Mengen de 34 años por continuados delitos de negociación de estupefacientes especialmente agravado en calidad de autor.
A su vez aplicó un delito de suministro de estupefacientes en reiteración con un delito de asistencia a la actividad de la negociación de estupefacientes, sin prisión pero con medida sustitutiva a la prisión por razones de salud, con arresto domiciliario para Y.P.T. de 55 años, la madre de dos de los procesados junto al padre el día lunes. La mujer tendrá prohibido salir de su domicilio, habiendo sido evaluada por médico forense.
También inició el proceso infraccional para los menores J.T.R. de 17 años y F.F.S. de 15 años, por continuados delitos de negociación de estupefacientes, siendo derivados a centros de internación de INAU.
De esta manera la Operación RAIN suma nueve procesamientos.
El trabajo de la Brigada Departamental Antidrogas de esta manera (con el apoyo de GRT e Investigaciones de Zona I) logra desbaratar tres bocas de venta de drogas y manda a la cárcel a un proveedor importante de varios lugares de comercialización. Nos referimos a Sena Mengen, quien hace un par de meses que había recuperado la libertad e instalado como pantalla un lavadero de vehículos en calle Rivera entre de Castro y Careaga y Giménez de Mercedes. Sena Mengen había caído con la banda del Litoral que en noviembre del 2015 terminó presa en Artigas, en su caso junto a su pareja y la hija de ésta, una banda que ingresaba drogas desde Artigas abasteciendo bocas en Artigas, Salto, Paysandú, Young, Fray Bentos y Mercedes, lo que habla de la importancia de este procedimiento y la permanente lucha de esta unidad ante un flagelo que tanto daño causa a la comunidad y en particular a la juventud. Y una vez más queda al descubierto el negocio familiar que representa la venta de drogas, en este caso padre, madre y dos hijos terminaron procesados por la venta de estupefacientes, gente con muchas vinculaciones en el Carnaval y el deporte. Y a ello se suma dos menores de edad, uno de 15 años, ya con antecedentes en la venta de estupefacientes.