En sede de AEBU en Mercedes se hicieron presentes junto al dirigente local Oscar Jorcín, Alvaro Legaspi, Consejero Central de AEBU, integrante de la Representativa del BROU, Carlos Márquez, Secretario General de la Banca Oficial y Consejero de la Banca Oficial.
Sobre su presencia Legaspi señaló, "estamos haciendo recorrida por el país, llevando nuestra posición a todos lados, el sindicato bancario se encuentra enfrentado a lo que es el planteo del directorio del Banco República, de un nuevo achique de las sucursales bancarias".
En ese sentido "hemos definido una serie de acciones que estamos impulsando, las cuales consisten en una campaña de recolección de firmas a nivel nacional en defensa del rol social del Banco República y de la banca oficial en general y también tenemos una serie de medidas gremiales articuladas que ya tenemos fechas para llevarlas adelante".
En el caso que el directorio del BROU fije un cambio en las estructuras del banco al día de hoy, "se activará la cláusula de prevención de conflicto, lo cual lleva a siete días de negociación en un ámbito tripartito, entre el Ministerio de Trabajo, el directorio del Banco República y el sindicato, que tratarán de dar luz al asunto. En caso que no haya acuerdo, las partes quedan libres de mano y pueden tomar las medidas que estimen necesarias, el directorio de llevar adelante los cambios que quiere impulsar y el sindicato tomar las medidas que quiere. Si luego de transcurrido este proceso el directorio en forma unilateral cierra un local bancario, se procederá a la ocupación por parte del sindicato. Nos preocupa crear un ámbito de negociación real, en el cual no solo estén los planteos de recorte del directorio del BROU, si no una serie de planteos que tiene el sindicato para el mejorar el negocio bancario, la rentabilidad del Banco República, dar mejor atención a los clientes, crear nuevas fuentes de trabajo. Sobre esa base debe haber un cambio".
También en ese sentido, añadió, "nos interesa llegar al más alto nivel político con este planteo, tratar de detener, revertir lo que ya pasó y construir con nuestro planteo, un banco al servicio de la población tal cual lo establece la carta orgánica".
Sobre la reunión mantenida en la tarde de este lunes con parte del directorio, Márquez dijo que se procura "actuar proactivamente para alcanzar acuerdos, lamentablemente la negociación que se sigue dando a nivel de sindicato con el directorio, no está dando resultados concretos, porque el directorio de la institución desde una perspectiva miope, sigue adelante con lo que tiene proyectado para la institución que es un modelo de gestión que nosotros no compartimos. Desviar lo que es el funcionamiento del BROU en cuanto a que sea una palanca de desarrollo, es decir un facilitador de la actividad productiva del país, es preocupante, es grave, y esto es lo que estamos haciendo con el conjunto de la población que se siente afectada con ésto".
Márquez fue crítico "tenemos una Ley de Inclusión Financiera que lejos de incluir está expulsando usuarios y clientes de la institución al sistema privado. Desde esta perspectiva nosotros tenemos vigente el convenio colectivo del sector público, sin embargo vemos que persisten visiones que no compartimos de no consultar a los sindicatos cuando se realizan procesos de reestructuración que nos involucra, de llevar adelante estos modelos de gestión que alejan del usuario".
Recordó, "cuando vivimos una crisis notoria en el BROU que estuvo a punto de quebrar y logramos fidelizar los usuarios y clientes con un trabajo importantísimo de nuestros compañeros, el país confió en el Banco República como un instrumento de desarrollo y lamentablemente a partir de estos modelos de gestión basados en una lógica de reducción de costos que ni siquiera se logran con el cierre de sucursales, lo que se está apostando definitivamente, lo vemos en cada rincón del país, es a desmejorar la eficiencia de la institución, a despersonalizar, a precarizar el servicio y esto no porque el sindicato bancario no vea hacia donde van los sistemas financieros en el mundo, la adquisición de tecnología va y va y nosotros no la rechazamos, lo que decimos, toda transformación de este tipo debe reconocer las pautas culturales del Uruguay, su promedio etario, sus usos y costumbres, no todas las personas desean atendidas a través de los medios electrónicos si no que decimos que se debe mantener la atención física en muchos lugares".
Dijo que desde el sindicato están "dispuestos a discutir desde esta perspectiva un proyecto de banco para los próximos años, en un modelo de país que apunte a que las instituciones públicas sean efectivamente o apuesten a una mejor distribución de la riqueza. Lo que vemos es que el Banco República persiste en esa lógica unilateralemnte y queremos que la población lo sepa, más allá de lo que vive el usuario cuando va al banco y nuestros propios compañeros por las carencias que hoy existen no los pueden atender de la manera que sería adecuada, que sepa de esta situación y busquemos la forma de organizarnos".
El sindicato bancario lo está haciendo "a través de una recolección de firmas, para expresar nuestro rechazo y que el directorio actúe acorde a las políticas en curso o a su espíritu por lo menos y que logre que todos estos cambios, conjuntamente con los trabajadores redunde en mejores servicios a la población que en definitiva es la dueña de la institución".
Respecto de la posición transmitida por el directorio de la institución en este último encuentro, Legaspi expresó, "al sindicato se le manifestó por parte del directorio que quedaba en suspenso la respuesta para el día viernes, porque de no mediar que se detenga el proceso planteado, el lunes estarían cerrando las cajas de Punta del Este y el sindicato tiene ya una medida tomada, que de cerrar esas cajas activaría la cláusula. Mañana (miércoles) analizaremos las medidas seguir, esa fue la respuesta que tuvimos en esa reunión".
Respecto de la recolección de firmas, Márquez manifestó que ya lo están realizando a nivel nacional, "tenemos unas papeletas que dejamos en las sucursales y agencias del banco, pero también estamos intentando involucrar a todos los actores que nos sea posible desde la perspectiva que la sociedad se expresa a través de eso tan sencillo que es la firma, en contra de algo que conceptualmente que es atentar contra el concepto de lo público, con todo lo que ha costado defenderlo.
Dejamos papeletas en cada sucursal, en caga agencia del país, pero también dejamos en las seccionales bancarias, en las casas de nuestros hermanos de clase que tiene, es decir otras organizaciones sindicales y sociales, todas aquellas que son parte de la familia de usuarios o clientes del Banco República o de aquellos que no lo son aun pero que pretenden que la gestión del BROU sea de cara a la gente y no de espaldas y que se incluya efectivamente al usuario como es el espíritu de la ley que mencionamos y se le brinden servicios adecuados, se pueda bancarizar a las personas efectivamente y nuestros compañeros logremos que trabajen en condiciones adecuadas, discutiendo las temáticas de fondo. Hacia donde va el BROU en los próximos diez años, otras organizaciones con sus empleadores lo puede hacer, lamentablemente nosotros no hemos tenido esa posibilidad, siendo que tenemos el convenio colectivo vigente y que nuestra organización a lo largo de la historia ha dado señales contundentes de realizar propuestas de equilibrar nuestro legítimo interés corporativo con el interés del conjunto de la población que es la dueña de las instituciones".
Finalmente Legaspi dijo que sobre el planteo para el 2017 no se precisaron fechas, "en el correr de este año se van a hacer los cambios, no solo Palmitas llevarla a dos días la atención, si no que hay 30 nuevas dependencias en todo el país que pasarían a la categoría de microbanca, eso no descartaría que otras localidades cercanas a Mercedes puedan perder la categoría, eso significaría que achique a la sucursal el negocio bancario y que además pueda funcionar con dos funcionarios, lo cual redundaría en mal servicio y menos acceso a todos los productos bancarios".