20 de May del 2017 a las 12:35 -
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Batlle fue un campeón de las libertades públicas, no son una idea de ayer: son de hoy y son de mañana…
Así se expresó el joven Ignacio Amy en el homenaje a los 161 años del nacimiento de Don José Batlle y Ordóñez

En el homenaje a los 161 años del aniversario del nacimiento de Don José Batlle y Ordóñez realizado en la Casa del Partido Colorado de Mercedes, en nombre de los jóvenes, quien hizo uso de la palabra fue Ignacio Amy.
Amy comenzó señalando que para él significaba "un honor hacer uso de la palabra el día de hoy".
Añadió, "estamos homenajeando a Don Pepe Batlle, el Presidente, el estadista, pero sobre todo elijo homenajear al soñador. El mismo que, en un escenario hostil y contra todo pronóstico, puso al Uruguay en la vanguardia y dejó una huella que marcaría a fuego el siglo XX".
Como representante de la juventud, dijo, "es que me siento en la obligación de recordar al Batlle joven.
Un rebelde y visionario que con la edad de 24 años viajo a Francia con el objetivo de volver con ideas para mejorar la patria que lo vio nacer. No hay duda, que aquel joven revolucionario de paso por Paris siempre tuvo la mente puesta en volver al Uruguay.
Estoy pronto para seguir todos los consejos que me das, menos aquel de que me olvide de la política de mi país…
A pesar de los años, de su fallecimiento, podemos preguntarnos: ¿Es Batlle joven? ¿Son sus ideas y sus obras parte de una época pasada? ¿Cuál es el legado de Batlle?
Luis Batlle Berres solía afirmar algo que resulta sugerente y comparto a cabalidad: Batlle en sí mismo no es un hombre viejo. Sus ideas están presentes. Batlle fue un campeón de las libertades públicas, no son una idea de ayer: son de hoy y son de mañana…".
Sostuvo que "fue Don Pepe que con su inteligencia, su habilidad, su humildad y su valentía construyó el Uruguay que nos permitió y permite al día de hoy disfrutar en el más amplio de los sentidos. Don Batlle y Ordoñez fue y es la referencia nacional del pensamiento, de las libertades, de la solidaridad, la tolerancia y de las reformas necesarias e indispensables poniendo siempre delante el País sobre los intereses personales.

Su obsesión era la de cambiar el país, cambiar pero no de la forma que muchos piensan hacerlo hoy sino cambiar el país para los próximos 100 años, y justamente estamos en los 100 años de la finalización de su segunda presidencia y solo debemos y no existe otra afirmación más que la de que “vaya si lo logró”!

Tal es así que sus obras hasta el día de hoy se mantienen en las raíces de los uruguayos y no se nos pasa por la cabeza cuestionarnos cosas por él desarrolladas porque ya son nuestras.

Con una visión única de lo que era necesario y bueno para los compatriotas logró durante sus dos presidencias construir un país modelo, un país modelo, en la concepción de Don Pepe era un país ejemplarizante hacia el mundo.

Los uruguayos todos le debemos honor a quien fue, junto a José Artigas, el más importante líder político y estatista de nuestro país y los jóvenes en particular debemos recordar su legado porque todos, desde los recién nacidos en Uruguay, como todos los niños, adolescentes, jóvenes, adultos, padres abuelos y ya fallecidos fuimos beneficiados por su obra.

La enseñanza gratuita! tal como la conocemos y que nadie se cuestiona fue su obra más importante para los Jóvenes. Uruguay fue el primer país en el mundo en tener una enseñanza totalmente gratuita. Antes de Batlle y Ordóñez los impuestos universitarios eran para los más pobres, los más humilde impuestos prohibitivos por lo que los hijos de los trabajadores ni si quiera soñaban con una educación universitaria. Fue él quien comenzó a eliminar esa desigualdad que es, la desigualdad en la educación.

Hasta Batlle la educación en las zonas alejadas de las principales ciudades era una cuestión de aquellos que tuvieran dinero, y es por ello que llevó los Liceos Departamentales a todos los rincones del país ya que para él, el liceo tiene además de lo educativo un alcance cultural y social.

Cuando el 4 de mayo de 1911 envió el mensaje al Parlamento para crear los Liceos Departamentales expresaba que “… los liceos constituirán un factor poderoso de mejoramiento intelectual, moral y social de los núcleos de población en que sean establecidos…” agregando además que se deben crear becas para alumnos que cursen estudios liceales en el interior para que continúen sus estudios universitarios en Montevideo porque para Batlle de esa forma, y así lo expresó el propio mensaje “es un estímulo para los que inicien sus estudios, en el sentido de que sus desvelos y sus esfuerzos sean premiados con una beca para continuar su preparación…”.

Más adelante, Amy señaló, "¿cuántos de los que estamos aquí presentes, y de la sociedad en su conjunto, si no fuera por estas obras de Batlle hubiéramos estudiado? Pensemos que fue por El que muchos tienen o tenemos nuestros títulos universitarios del cual nos sentimos orgullosos como nuestros padres. Sin Batlle probablemente esto no hubiera sido posible.

La enseñanza laica y la asistencia obligatoria, de la que hoy hablamos permanentemente fue también obra de Don José Batlle y Ordoñez, como también el Consejo Nacional de Educación Física, las Escuelas Industriales Gratuitas hoy llamadas Universidad del Trabajo del Uruguay (UTU). Centenares, miles de jóvenes se forman hoy en los establecimientos de UTU en todo el país y ello se debe a que el Gran Reformador no concebía un país sin jóvenes que no pudieran estudiar, instruirse y ser los trabajadores que el propio país necesitaba.

Batlle predicó trabajo y luchó constantemente por los principios de los cuales estaba convencido que era lo mejor para todos, para para todos y pensando siempre en el mañana, en el futuro, en el país del futuro y no en el próximo período electoral.

Para Batlle los jóvenes no eran un objeto de manipulación de forma de lograr los objetivos personales o partidarios sino que por el contrario para Batlle los jóvenes eran el futuro del país y por ello los jóvenes acudía a él y les decía "… estudiantes, vosotros sois el porvenir, ...sois la sinceridad y el entusiasmo..., mi entusiasmo se acrecienta en vuestra presencia... Esperad conmigo días felices para la Patria, días de grandeza, los días con que soñamos…”

Hablar de Batlle y Ordóñez es hablar del Partido Colorado, porque el Partido Colorado lo lleva en su ADN y en toda la obra del Partido y podemos decir hoy que los Centros CAIF, que son uno de los elementos de contención más importantes de nuestra sociedad actual son creados por una concepción netamente batllista y que el Partido Colorado diseñó estando en el Gobierno.

Hoy, para homenajear y agradecer a Batlle su obra, los jóvenes debemos repetir junto a él su expresión de viva el porvenir!!! Viva Batlle!!! Viva el Partido Colorado!!! Viva el Uruguay!!!", concluyó Amy

 

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