En las últimas horas hubo dos nuevas actuaciones por violencia doméstica, que involucran a personas que cumplen funciones públicas. Por un lado la señora de un edil departamental de Sorian, se presentó ante la Unidad Especializada de Violencia Doméstica y Género para realizar denuncia por amenazas, algunas de ellas de gravedad, lo que determinó la actuación judicial que decidió la prohibición de acercamiento.

Mientras tanto una oficial ayudante de la Policía que llegó a estar transitoriamente a cargo de una seccional recibió denuncia de su pareja, y por el protocolo del Ministerio del Interior se le retira el arma, lo que indudablemente resiente su función. Esta oficial es pareja de un ex policía que hace unos años fue procesado por violencia doméstica precisamente hacia ella, enviado a la cárcel por la golpiza a la que la sometió y terminó siendo echado de las filas policiales por este caso, ella después estuvo tiempo fuera de Mercedes, pero continuaron conviviendo y ahora es el hombre el que denuncia a ella, y se le retira el arma, algo que está complicando la gestión del Jefe de Policía ya que son varios los funcionarios con esta situación y algunos de ellos que están a cargo de zona, seccional o segundos en comisarías, con lo que ello significa al tener que actuar en determinados procedimientos.