Montevideo (Por Maurin Goldman, especial para Agesor). “La Privatización educativa en América Latina”. Ese era el título de la charla que se brindó este miércoles en la sede de APU en Montevideo, a metros de la intendencia capitalina. La actividad, que tuvo una etensión cercana a las tres horas, fue organizada por la Internacional de la Educación, Fenapes (Federación Nacional de Profesores) y FUM TEP (Federación de Magisterio).
Hasta allí fue 20Once conjuntamente con otros colegas del interior del país para cubrir la misma que tuvo una extensión cercana a las tres horas.
En la oportunidad disertaron Mauro Moschetti de Argentina, Converti Rodríguez de Costa Rica y Angelo Gavrielatos de Australia conjuntamente con el presidente de Fenapes, José Olivera quien también brindó su opinión.
Gavrielatos fue durante muchos años dirigente sindical, también presidente de la Federación de educadores de su país y hoy es director de la campaña mundial que ha lanzado la internacional de la educación sobre comercio y privatización educativa.
Destacó que “los trabajadores valoramos mucho el vínculo con el mundo académico. No hay nada más importante que la educación. Define el futuro. Es la fuerza más poderosa que existe. Debe lograr calidad para todos, debe ser de acceso gratuito y pública. Todos los niños deben recibir educación de calidad”. A posteriori hizo énfasis en la inclusión. “En 2015 Naciones Unidas a través de su gobernanza mundial definió los objetivos educativos refiriéndose a la inclusión y asegurando que todos los niños completen una educación gratuita primaria. Además se debe contar con un profesor bien apoyado, remunerado, en todas las aulas”.
Remarcó que muchos gobiernos se sienten identificados con los postulados pero “cuando vuelven a sus países no lo hacen. Hay tendencias privatizadoras y buscan comercializar la educación. De esa manera los gobiernos dejan de cumplir su obligación. Se omite inversión y se deja de proteger a la educación pública”.
“Hay Corporaciones que tienen entre sus objetivos el rédito pero los primeros que pierden son los estudiantes”.
Una investigación se está realizando en Uruguay sobre este fenómeno. En Uruguay ha avanzado la “privatización de la educación” pero a otro ritmo, es de los países con menor crecimiento en América Latina.
El australiano aterrizó el tema con cifras indicando que “la educación se valora, 4,9 trillones de dólares cuesta la educación en EE.UU. y va a seguir creciendo. Por lo tanto hay corporaciones mundiales que ven a los estudiantes como clientes, quieren sacar un rédito. Pero lo hacen bajando calidad, contratando maestros no recibidos para pagar menos, sin bibliotecas ni canchas de juego. Yo una vez hablando con ellos les pregunté, ¿Mandarían sus hijos a sus colegios?”.
Por su parte Mauro Moschetti es investigador de la Universidad Autónoma de Barcelona, es de nacionalidad argentina. Desde el departamento de Sociología de la propia Universidad se hizo el trabajo que tenía el propósito de dar cuenta del proceso de políticas de privatización educativa en América Latina en las últimas décadas.
Nuestro continente es donde más ha crecido la matriculación en instituciones privadas. Es una tendencia en aumento en los últimos 20 años. “Todas van en crecimiento en este período. Va ganando la lógica de la educación como un bien de consumo y eso trae como consecuencia políticas de privatización. Otros estudios han analizado el rol de los organismos internacionales como el Banco Mundial o el Banco Interamericano de Desarrollo, organismos con inclinaciones pro mercado y pro privado que han avanzado en ciertas políticas privatizadoras”.
Agregó que “otros estudios han considerado que la privatización es un resultado directo de ideologías globales hegemónicas, el neoliberalismo, la llamada nueva gestión pública”.
Moschetti hizo hincapié en que no todas las instituciones privadas son iguales, “las investigaciones hacen foco en los resultados (matriculación) no en los procesos que son bien distintos”.
Los expositores coincidieron en que la evidencia académica es negativa para la educación privada. “El rendimiento está en el nivel socio-económico de las familias. A mismo nivel los resultados son mejores en la educación pública”.
El dirigente gremial Olivera consignó que “se ha ido construyendo entre los actores pro privados que lo privado es mejor que lo público y en ese sentido hay evidencia concreta”.
Agregó que “en 2002 no se vaciaron los bancos públicos, los privados sí. Esto tiene que ver con que se ha ido construyendo sentido común que lo privado es mejor”.
Se insistió por parte del panel en “democratizar la educación pública. Darle los recursos que necesita porque si no los tiene allí se beneficia el privado”.
Olivera aseveró que “cuando se recorta presupuesto en la educación allí se beneficia a los privados. Este año se recortaron 793 millones de pesos”. Llamó a “combatir la tendencia mercantilizadora” y recordó que “la clase obrera tiene propuestas”.
Moschetti recordó factores endógenos y exógenos en el proceso privatizador, “en el exógeno allí el objetivo es promover la emergencia y expansión de proveedores privados. El sector público se abre bajo diversas formas a la participación del sector privado. En cambio en el proceso endógeno el sector privado no opera directamente sino que piensa el sistema público aplicando normas y reglas propias del sector privado”.
El exógeno consiste en la subvención que un gobierno le ofrece a un privado. En el endógeno se remunera a los docentes según la evaluación en el desempeño como docente, se aplica una lógica empresarial.
Converti Rodríguez es coordinador principal de la Internacional de la Educación para América Latina, proviene de Costa Rica.
En su exposición insistió en que “hay una tendencia muy clara de profundizar el eje del comercio educativo. Es un tema que está instalado. El secretismo manda en estos casos. A los Estados les ha quedado cómodo pasar la administración a otros actores, privados nacionales o trasnacionales”.
Destacó que hay un grupo en la OCDE que promueve el comercio de los servicios, “es donde se focaliza la concentración del dinero. Vienen con el slogan de querer mejorar la educación. Hay una voluntad política de apertura económica, vamos por esa ruta. Esto nos obliga a conocer y a investigar.”
Consultado sobre la propuesta de colegios privados que ofrecen horario completo, Gavrielatos mencionó a un país modelo en educación como Finlandia, “tiene los mejores indicadores y los niños no hacen horario completo”.