Estuvo en la Unidad 24 del INR de Pense, el Comisionado Parlamentario para las Cárceles, Juan Manuel Petit, quien estuvo acompañado de dos asesoras de su oficina y de los diputados Enzo Malán y Gonzalo Novales. La visita fue ante la solicitud de mujeres privadas de la libertad que reclamaban su presencia y algunos familiares a los efectos de efectuar planteos.
Petit se entrevistó una por una, lo que a su vez también hicieron sus asesoras, la preocupación es que en esta Unidad hay unas 30 mujeres recluidas, o sea que está por encima de la cantidad prevista cuando se construyó, y además con sus madres hay ocho niños. Recibió muchos planteamientos, algunos fueron elevados al Tte. Luis E. Rosas, Director de la Unidad y éste se comprometió a que lo que estaba a su alcance lo iba a solucionar, pero de acuerdo a lo que surgió de algunas entrevistas "pareciera que Rosas no se entera algunas cosas, que no le llegan a él", indicó fuente de la delegación visitante. Catalogaron como "positivo" que haya llegado el Comisionado para escuchar a las personas privadas de la libertad.
Se presentó por parte de algunos familiares y reclusos la demora en el acceso a la visita, que deben ir muy temprano en la mañana y esperar horas para poder ingresar y también cuestionan la demora en entregarles las encomiendas que se envían desde otros lugares, lo que en estos tiempos, ocasiona que los alimentos que son perecederos lleguen en mal estado.
Los mayores cuestionamientos se hacían hacia las mujeres tanto de la Policía como de las operadoras, especialmente en la zona de admisión y revisión de las cosas. El Comisionado en ese sentido encontró "falta de liderazgo y coordinación entre ese personal, que no motivaban a la gente a hacer las cosas en beneficio de todos", indicó la fuente consultada.
Asimismo se reconoció que hay parte del personal "que no está preparado y que no lo hace por vocación, si no que se presentó en su momento como una fuente de ingreso laboral".
Otra de las inquietudes planteadas por las mujeres fue la que ingresar al encierro a las 18.00 horas y hasta las 8.00 del día siguiente no se les abre, que las celdas son chicas y el calor de estos días hace que los ventiladores no den abasto para la cantidad de personas, recordemos que ya supera las 300 personas cuando fue creada para 220. De acuerdo a la fuente consultada "el Tte. Rosas explicó que tenían más horas de patio y que lo hacía en el propio campo, pero que ahora eso había acortado por problemas de conducta. Debe quedar claro que los derechos no se pierden nunca, pero sí se pierden los beneficios que logran en virtud de la conducta que se demuestra allí adentro".