Mostrar publicidad
13 de February del 2017 a las 10:43 -
Tweet about this on TwitterShare on FacebookShare on LinkedInPin on PinterestEmail this to someone
Homenajearán  a José  Enrique Rodó
En Soriano  será  el  17  de  marzo  próximo,  con actividades culturales  y un homenaje   junto al busto que  recuerda  su figura en la  localidad que tomó su nombre.

Con un acto frente al busto que recuerda su figura y actividades culturales  recordarán  el  centenario de la  muerte  de   José Enrique Rodó. En  Soriano las  actividades  se  desarrollarán  en la localidad  que lleva  su nombre, pero se  extenderán  en todo el  país.

En Rodó la actividad principal se  realizará  el  17  de  marzo próximo, frente al busto que recuerda  su  figura.  En la localidad el Municipio  junto con el Comité patriótico  viene coordinando la actividad que se realizará que se centrará  frente al busto de José Enrique Rodó. También el Club  Rodó realizará  una actividad similar en su parque deportivo, “Ariel”  que recuerda una de las obras  literarias destacadas del escritor.  Junto al busto de Rodó en el bulevar se  descubrirá  una placa, realizándose un acto cultural, donde también se leerán algunos pasajes de su obra.

Además  el Municipio  planteará  al  liceo  local la  posibilidad  de  realizar una maratón de lectura” con algunos de los textos  de José  Enrique  Rodó.

 

 José Enrique Rodó (*)

Nació en Montevideo el 15 de julio de 1871 y falleció en Palermo (Sicilia) el 1º de mayo de 1917. La estatura de su prosa y la dimensión de su talento quedaron nítidamente establecidas ya en 1900, con la publicación de Ariel, el cual tuvo una resonancia amplísima en todo el ámbito de habla española. Anteriormente había publicado La Vida Nueva (1897) y el estudio critico sobre Rubén Darío (1899). Reconocido, pues, tempranamente, alternando su labor de escritor con las actividades políticas (fundador del “Club Libertad”, que pugna por la unificación del Partido Colorado Representante por Montevideo en la XXI Legislatura, electo para la XXIII Legislatura y vuelto a elegir para la legislatura siguiente) José Enrique Rodó se convirtió en uno de los principales integrantes de la generación del 900.

Comparte con Vaz Ferreira el magisterio ideológico, la prédica incesante, el afán por dirigirse a la juventud y hacer de ésta la palanca de renovación de una sociedad que necesitaba el cambio y de un espíritu al que se debía sostener, levantar y engrandecer. Pero a diferencia del autor de Lógica viva, el medio del que se vale su expresión es una prosa cuidada, a veces rotunda, a veces llena de matices y de sabias modulaciones. Heredando del modernismo la pasión de la forma, no confundió sin embargo estilo con “fermosa cobertura”. Para Rodó el estilo es una forma de ser (tal vez del ser) en la que se identifican la verdad y la belleza. “Era el que escribía mejor”, señaló Alfonso Reyes en 1917, “y era el más bueno”. El propio Rodó dijo: “Decir las cosas bien, (...) ¿no es una forma de ser bueno?...” El desarrollo de la prosa hispanoamericana tiene en él un hito relevante. “Color”, “resalte”, “melodía”: tales características, que Rodó manifestó expresamente como autoimposiciones de su ideal artístico, corren desde entonces en la sangre de nuestra prosa. Tratarla después de Rodó es -reflexiva o irreflexivamente- contar con ellas y hacérsenos carne la realidad y densidad del idioma. Crítico, pensador, periodista, educador, político, Rodó es el ensayista (obviamente, nuestro mejor ensayista). Cuantos ataques se han llevado, o quieran llevarse aún, contra su arielismo, su esteticismo, su pretensa evasión o su desdén hacia los problemas reales que fundamentan las crisis de una sociedad, resultan improcedentes. Un alma tensa, una pudorosa angustia, una desazón creciente ante lo que significa escribir en estas latitudes, muestran en sus últimas páginas a un escritor cuya palabra resuena con fuerza en nuestros días y cuya capacidad emotiva y suscitadora se orienta hacia el futuro.

Obras: La Vida Nueva: “El que vendrá” (1896-97), “La novela nueva” (1897), “Rubén Darío” (1899); Ariel (1900); Liberalismo y jacobinismo (1906); Motivos de Proteo (1909); El mirador de Próspero (1913); El camino de Paros (Barcelona, 1918); Epistolario (París, 1921); Hombres de América (Barcelona, 1920); Nuevos Motivos de Proteo (Barcelona, 1927); Últimos Motivos de Proteo (Montevideo, 1932).

 

(*) Tomado de: 100 autores del Uruguay.  Paganini, Alberto - Paternain, Alejandro - Saad, Gabriel Editado por: Capítulo oriental.

 

 

(2983)


COMENTARIOS

Quiere comentar esta noticia?

* Campos obligatorios
* Nombre:
* Correo Electrónico:
* Comentario:
* Caracteres
Composite End
WordPress Appliance - Powered by TurnKey Linux