Los servicios técnicos de UTE habían recomendado para enero un incremento de las tarifas de 4,62% frente al 7,5% que fue anunciado por el Poder Ejecutivo para la luz eléctrica.
Así lo indica un informe elaborado por el Prof. José Amy, integrante del directorio de la empresa en representación de la oposición, en el que fundamenta su voto negativo al ajuste.
Consultado por la Agencia Soriano de Noticias, @gesor, Amy señaló que su oposición al aumento se basó en tres factores: la evolución de las variables macroeconómicas, la cantidad de potencia instalada en el sistema y el precio internacional del petróleo.
El director recordó que ya el aumento de 9,85% registrado este año estaba por encima de la inflación, pero la suba fue justificada en base al incremento del dólar y del crudo, al cual estaban indexados los contratos de compra de energía a privados y los costos de abastecimiento de la demanda.
"Este año el dólar retrocedió frente al peso 4% por lo cual, en caso de que aquel argumento fuera verdadero, debería incidir en un ajuste a la baja de la tarifa", sostuvo Amy.
Marcó a su vez que los informes técnicos de UTE indican expresamente que el incremento de 2017, resultante de la aplicación de las variables macroeconómicas proyectadas y su incidencia en la paramétrica de erogaciones, debería ser de 4,62%, frente al 7,5% resuelto por Economía y Finanzas.
Los cálculos técnicos se basan en las proyecciones del propio gobierno en cuanto a la evolución del IPC, el dólar y los salarios.
Amy descartó a su vez que el ajuste pueda justificarse debido a la escasez energética, teniendo en cuenta que desde hace tiempo el país es excedentario en oferta y que en el curso del año que viene se incorporarán dos nuevas turbinas de ciclo combinado.
Recordó que las recientes exportaciones de energía a Argentina y a Brasil no resultaron exitosas y en algunas ocasiones UTE terminó haciéndolo por debajo de los costos de generación.
En cuanto al petróleo, el director colorado sostuvo que esta variable ya no tiene una incidencia significativa, dado que un importante porcentaje de la energía generada se basa en fuentes renovables.
Amy preguntó si el fin último del aumento decidido por el Poder Ejecutivo no perseguirá el objetivo de equilibrar las cuentas públicas.
Hace dos semanas, el directorio decidió transferir a Rentas Generales 530 millones de pesos correspondientes a la Versión de Resultados de este año, y casi 4.000 millones correspondientes a 2015.
Es decir que, en dos años, la contribución de UTE a las arcas estatales ascendió a 540 millones de dólares.
Amy volvió a cuestionar en cuánto podría haberse reducido la tarifa si parte de ese valor se hubiera traspasado a precios.
En la red social facebook el Director José Amy publicó lo siguiente:
FUNDAMENTACIÓN DE MI VOTO NEGATIVO AL AUMENTO DE LA TARIFA DE ENERGÍA ELÉCTRICA EN EL DÍA DE HOY:
Montevideo, 22 de diciembre de 2016
A través de la presente Constancia de Acta fundamentaré las razones de mi voto negativo al aumento propuesto de la tarifa.
La oposición al mismo se basa en tres factores: 1) la evolución de las variables macroeconómicas, 2) la cantidad de potencia instalada en el sistema, y 3) el precio internacional del petróleo.
1) Variables macroeconómicas
En ocasión de la anterior propuesta de ajuste tarifario, la cual también vote negativamente, se propuso una tasa de aumento de 9,85%, cuyo valor estaba por encima de la tasa de inflación. El argumento esgrimido en aquel momento para justificar la suba, fue que los contratos de compra de energía a generadores privados, así como el precio del petróleo, que componían una importante parte de los costos de abastecimiento de la demanda (CAD), estaban indexados en dólares americanos, por lo cual, debido al aumento del tipo de cambio durante el año 2015 (del orden del 22%) y a que UTE recauda en pesos, la empresa se veía sometida a una exposición financiera.
Este año, a diferencia del anterior, el dólar retrocedió frente al peso en aproximadamente un 4%, por lo cual, en caso que aquel argumento fuera verdadero, el tipo de cambio incidiría en un ajuste a la baja de la tarifa.
Asimismo, de acuerdo a los informes técnicos expuestos en el proyecto de Resolución, se indica expresamente: “el incremento de resultante de la aplicación de las variables macroeconómicas proyectadas y su incidencia en la paramétrica de erogaciones de la Empresa es del 4.62% a partir del 1 de enero de 2017.” Estos cálculos surgen de los supuestos comunicados por el Gobierno para IPC (8.83%), dólar (14.32%) y salarios (8.97%).
2) Potencia instalada en el sistema
Uruguay desde hace un tiempo es excedentario en oferta de energía, y en el curso del próximo año se incorporaran al menos dos turbinas del ciclo combinado. Las gestiones para exportación de energía a Argentina y Brasil no han sido exitosas, y en algunas ocasiones se ha terminado exportando a precios sustantivamente inferiores a los costos en los que incurre UTE para generar esa energía, del entorno de 7 USD/MWh. En consecuencia, no puede justificarse el ajuste de tarifas debido a escasez del recurso, sino todo lo contrario.
3) Precio internacional del petróleo
En primer lugar, el precio del barril de petróleo está en valores relativamente bajos, al 21/12/2016 la cotización del barril Brent es de USD 54,45, y de acuerdo a la información disponible las reservas de EEUU han aumentado en 2:300.000 barriles, y existen versiones sobre la posibilidad que Libia aumente su producción. Por otra parte, esta variable ya no tiene tanta incidencia en el CAD, dado que un importante porcentaje de la generación térmica que antiguamente servía para abastecer la demanda ha sido desplazada por las fuentes renovables recientemente incorporadas. Muestra de ello fueron las Resoluciones tomadas por el propio Directorio de UTE, en forma unánime, en los años 2015 y 2016, de desafectar definitivamente las unidades térmicas Sala B (R 15.-2311), 5ª y 6ª de la Central Batlle (R 16.-1466).
En base a lo expuesto previamente surgen algunas preguntas: ¿son las tarifas de energía eléctrica un instrumento para equilibrar las cuentas públicas? ¿cuál es el fin último del aumento de tarifas?
Quiero recordar que hace dos semanas este mismo Directorio ordenó el envío a Rentas Generales de un adicional de $ 531:000.000 (R 16.-2826) de la Versión de Resultados de 2016, la cual ascendía a $ 2.194:864.320, (R 15.-2928), y $ 4.060:000.000 (R 16.-2839) por concepto de ajuste de la Versión de Resultados de 2015, la cual ascendía originalmente a $ 2.008:110.000 (R 15.-988). Por otra parte en el día de la fecha está para tratarse el proyecto de Resolución disponiendo ordenar de la Versión de
Resultados de 2016 un nuevo adicional por un monto de $ 4.467:400.000, y
la transferencia por Versión de Resultados de 2017 por un monto de $ 2.379:232.920.
Realizando la conversión a dólares americanos (USD) de las Versiones de Resultados acumuladas de UTE en el período 2015 – 2017, las transferencias a Rentas Generales ascienden aproximadamente a USD 540:000.000.
¿En cuánto podría reducirse la tarifa si una parte de ese valor se destinara a tales efectos?
Estas transferencias ocurren concomitantemente con un recorte general de las inversiones de la empresa, en particular en un área estratégica como es
Distribución, la cual tiene un impacto directo en la calidad de servicio que ofrecemos a nuestros clientes.
El transcurrir de los días profundiza la desazón que nos provoca que no se puedan cosechar los frutos del acuerdo partidario de 2010, cuyo objetivo, entre otros, era bajar la tarifa a través del cambio de la matriz energética.