Un caso no habitual se dio en Colonia, que involucra a dos figuras públicas, que además de compartir la actividad política, desde hace veinte años compartir la vida en pareja. Se trata del asesor de Obras de la Intendencia de Colonia, Oscar Cáceres un histórico dirigente del Partido Nacional y su pareja la Edila María José García, que representa a la Lista 2 con el sub lema "Colonia en buenas manos" e integra las comisiones asesoras de Cultura, Deportes y Juventud y la de Obras Públicas.
Cáceres y García están casados desde 2008 y se conocieron cuando ella tenía 19 años y él 60, en la actualidad ella tiene 40 y él 80 años, de la unión de esta pareja nació un niño que hoy tiene 10 años.
En los últimos días la pareja cobró notoriedad más allá de sus actividades políticas, por una denuncia que interpuso Oscar Cáceres, a través de su abogada Virginia Moleda, por Violencia Doméstica, contra María José García, su esposa.
Cáceres se presenta como una persona de 80 años, con varias patologías que lo muestran con una salud muy frágil, habiendo estado internado varias veces en el Hospital Evangélico de Colonia.
En el relato de la denuncia, Cáceres cuenta que el 20 de octubre le pidió a su señora "ver a todos mis hijos pues me sentí muy mal, sentía me estaba muriendo. En esa oportunidad concurrieron mis hijos a mi casa y al verme tan mal decidieron llamar a la médica para pedirles me internen pues me veían muy mal. No estaba mi médico de cabecera. La señora García se negaba me internaran. A raíz de mi delicado estado de salud fui internado y hasta la fecha permanezco internado".
Reconoce que la relación con su señora no es buena, "siempre discutimos mucho y la señora García se pone muy nerviosa", actualmente "estoy recibiendo asistencia psicológica durante mi internación".
A su vez señala que "desde hace tiempo la señora García no permite que mis hijos ingresen al apartamento (en el que viven)".
Denuncia que ha tenido "faltantes de dinero, muchas discusiones son por dinero, pues la señora García gasta de manera compúlsiva el dinero y no paga las cuentas".
Explica en la denuncia que hicieron separación judicial de bienes y allí se le adjudicó a él "el apartamento", porque "es un lugar donde no hay polvillo, estoy cerca de mi trabajo en la intendencia y del Hospital Evangélico, siendo que muchas veces debo tener atención o ser internado por mi delicado estado de salud".
Indica que para que su señora y el hijo de ambos tengan un lugar donde vivir, compró "una casa quinta".
Dijo que su interés es "solicitar una medida cautelar de restricción por el plazo máximo legal y se retire a la señora García del hogar", el departamento que le fue adjudicado a él.
Denuncia que la señora García "tiene problemas de nervios, se pone muy nerviosa, grita, discute, incluso con nuestro hijo. Ha habido situaciones de violencia física, en una oportunidad discutiendo me lastimó con una llave, lastimándome en la cara y la mano, yo soy una persona diabética".
Durante la internación de Cáceres, ella concurre "de manera esporádica", añadiendo "no me cuida ni durante el día ni durante la noche. Quienes me dan de comer son mis hijos los cuales se van turnando", para la noche contrató servicio de acompñante.
Cáceres sigue relatando en la denuncia que a raíz que está muy delicado de salud, "cada vez que viene la señora García me pone muy nervioso, solicité al Hospital no entre a la habitación la señora García. Hace unos días de noche entró a la habitación y vino a darme un beso y en la mañana la nurse le pidió no entre y se descompensó, comenzó a llorar, tuvo que venir el Director del Hospital para controlar la situación".
La señora García le dijo que "había cambiado la cerradura del aparatamento donde vivimos, lo cual me produce una gran angustia porque cuando me den el alta no voy a poder ingresar a mi hogar".
Seguidamente se hace mención a informe médico sobre los perjuicios que sufre en su salud por esta relación con la señora García, finalmente la Dra. Virginia Moleda, abogada de Cáceres presenta "denuncia de violencia doméstica con la señora García, por violencia emocional, psicológica, económica y física, solicitando medida cautelar de restricción por el máximo legal y retiro del hogar".
Posteriormente, Cáceres fue notificado policialmente, de la decisión judicial de la Dra. Lorena Giuliano Jueza Letrada de Primera Instancia de Segundo Turno, expresando la "prohibición de acercamiento y comunicación por parte de la ciudadana María García por el espacio de 90 días, comprendiendo todos los lugares que frecuenta el denunciante (incluido Hospital Evamgélico), debiendo este una vez sea dado de alta, reintegrarse a su domicilio de calle Rivadavia apto. 402 galería de Las Américas, previa entrega por parte de García, de copia de llaves del mismo en esta unidad, evitando así cuanlquier extravío. Firmando para constancia conjuntamente con Policía actuante, en este acto se le hace entrega de copias llave del departamento en calle Rivadavia, entregadas por parte de la señora García".
A su vez, la Dra. Virginia Moleda, abogada de Cáceres pidió a la Justicia que se notifique a la Intendencia de Colonia y a la Junta Departamental, la situación de la edila María José García, ya que por la medida cautelar García no podría concurrir a la Junta Departamental cuando Cáceres esté trabajando en su oficina de la Intendencia o en el apartamento donde vive, que está cercanos entre sí.