En la visita a la Unidad 24 del INR en paraje Pense, @gesor dialogó con el Director, Tte. Luis Eduardo Rosas, quien realizó consideraciones respecto a la gestión que está llevando adelante con el equipo que lo secunda, "nos encontramos con una unidad nueva, un Comando nuevo y con ganas de trabajar".

En lo personal, "ha sido un cambio difícil, una tarea nueva para mí, pero como oficial de Policía que soyo, se me otorgó esta misión y tengo que cumplirla lo mejor posible".

Considera que las políticas del INR "no están alejadas de las de seguridad que ya se están aplicando hasta la fecha".

Habló de su preocupación "por la cantidad de jóvenes que tenemos acá en la población, la reincidencia, de 250 personas, 148 masculinos son reincidentes y 11 mujeres, y nos ocupamos tratando de desarrollar tareas para ayudar a esta gente".

En la conversación que ha tenido con las personas privadas de libertad (PPL), al hablar de la reincidencia hacen mención "al barrio, los amigos, muchos se preocupan porque salen y le ofrecen volver a la droga".

En la Unidad hay problemática variada, "pero lo que les preocupa a los internos es la reincidencia, el volver al barrio, con los amigos, otra vez la droga, es un problema social ya instalado".

Destacó el relacionamiento con las familias, "es bastante bueno, en estos momentos tenemos algunos proyectos, hay familias contenedoras, ayudan al interno, ya sea hijo, nieto, hemos tenido reuniones, que venían de antes, acompañan y colaboran mucho, es muy necesario la presencia de la familia para poder apuntar a la rehabilitación, que sientan el acompañamiento de la familia, que no estén solos".

Sobre la presencia de mujeres en la unidad, "más allá que todas las personas son iguales, su condición de mujer hace más compleja la situación en un contexto de encierro, la Unidad cuenta con instalaciones adecuadas, un par de salas maternales, eso favorece la tarea. En este momento hay una mamá con su hijo, hubo más antes, tenemos mucha colaboración desde el Mides, el Ministerio de Educación y Cultura y la Intendencia de Soriano que nos ha dado una mano bastante grande. Porque cuando salimos a pedir, cuando se dice que es para la cárcel la gente no colabora mucho, y la Intendencia en materia prima ha colaborado mucho".

Valoró el apoyo desde "la Subdirección Nacional Administrativa del INR siempre atenta a las necesidades de la Unidad, en ese aspecto no nos podemos quejar, es una Unidad muy nueva, en cuanto a proyectos laborales a veces precisamos materiales y en ese aspecto apelamos a la comuna que nos ha dado una mano, al igual que con servicios".

En cuanto a la selección de quienes participan en los proyectos laborales y sociales, Rosas explicó, "generalmente el interno que se selecciona viene con un seguimiento prácticamente desde su ingreso, el INR tiene previstas las juntas de tratamiento, que es la que selecciona el perfil, y luego lo eleva a Montevideo, donde la Subdirección Nacional Técnica es la que colabora con la selección y nos apoya para que sea correcta. La idea es que individuo sienta que devuelve un poco ese daño o perjuicio que causó a la sociedad, con estas actividades de las BAC (Brigadas de Acción Comunitaria), trabajando en las escuelas, los liceos, allí donde van sus propios hijos, reparando de alguna manera el daño causado".

A manera de mensaje hacia la comunidad, Rosas indicó, "el sistema trata de aportarle algo a cada ser humano, dejarle algo, que la sociedad se dé cuenta que esa persona salió con algo de acá, no digo que los dejamos en condiciones de volver a la sociedad, pero sí que cuando pasa por este sistema, nosotros tratamos de dejarle algún valor, hábito, que ello se vea y que cuando salgan a buscar trabajo lo tenga en cuenta".