La Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria recomendó leer en las aulas el próximo miércoles la proclama del sindicato en la que critican al gobierno Tabaré Vázquez por el decreto de esencialidad.
La proclama fue aprobada por la Asamblea de la Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria el sábado y señala que el gobierno del presidente Vázquez fue en contra de los derechos conquistados por el sector.
La Asamblea General de Delegados de FENAPES resuelve:
"1) Respaldar lo actuado por el Comité Ejecutivo de en los ámbitos parlamentarios (Comisión de Legislación del Trabajo y Comisión de Educación y Cultura, Cámara de Representantes) así como en la DINATRA (MTSS) en el marco del actual conflicto con el codicen de la ANEP y el CES en Defensa de la Libertad Sindical, la Negociación Colectiva y los Derechos de los Trabajadores.
Reclamar al CODICEN de la ANEP y al CES concretar en la DINATRA, el próximo martes, los compromisos asumidos el viernes 19 de agosto ante la Comisión de Legislación del Trabajo del Parlamento, sobre la base de :
Funcionamiento acorde de los ámbitos de Negociación Colectiva.
Respeto a la Libertad Sindical.
Cumplimiento del acuerdo alcanzado entre CES y FeNaPES el 18 de marzo de 2016.
Respeto irrestricto al Estatuto del Funcionario Docente.
Aprobar la realización de un paro nacional de 24 horas en fecha a coordinar en el marco de la CSEU y del PIT C NT con la siguiente plataforma: “En Defensa de la Educación Pública: contra los recortes presupuestales en la ANEP y los procesos de mercantilización y privatización de y en la Educación Pública. En Defensa de las Libertades Sindicales: a un año del decreto de esencialidad seguimos reclamando el pleno respeto a nuestros derechos.
4) Hace un año el Presidente de la República, Tabaré Vázquez, en compañía de su Consejo de Ministros, decretó la esencialidad de la educación para los subsistemas de Inicial, Primaria, Secundaria, Técnico Profesional y Formación Docente.
Continuamos denunciando que se trató de una práctica reñida con los derechos conquistados a través de la lucha de generaciones de trabajadores.
El decreto de esencialidad no fue más que un recurso extremo del gobierno para mantener una insuficiente asignación presupuestal que nos condena a mantener edificios en pésimas condiciones, liceos con una cantidad insuficiente de funcionarios y docentes mal retribuidos.
Los firmantes del decreto de esencialidad se colocaron, junto a los interventores de la enseñanza de la década de los 70, como protagonistas de una de las páginas más tristes en la historia de la educación pública nacional.
Nuestra continuidad en la lucha por mayor presupuesto, políticas educativas integrales, nuevos edificios liceales, el respeto de las libertades sindicales y de los derechos estatutarios, así como la denuncia de la constante violación de los ámbitos de negociación, confirman que quienes quisieron quebrar la herramienta sindical, no pudieron hacerlo. Se encomienda a las filiales la más amplia difusión de esta declaración, en especial dar lectura a la misma el 24 de agosto en las aulas".