El edil Luis Rico (lista 903-PN) pidió que se aplique la ley de “Vagancia, mendicidad y estados afines” a las personas que deambulan por la calle pidiendo dinero.
El edil nacionalista indicó que “en los últimos tiempos se ha visto incrementado el flujo de personas jóvenes ejerciendo la mendicidad” y que “según me han dicho en algunos casos han visto a personas que probablemente son poseedores de antecedentes penales o que han pagado penas”. Comentando Rico que “el problema no es la mendicidad en si, sino la actitud de esas personas. Según vecinos, algunos de estos se presentan con el “Cuento del tío”, diciendo que son trabajadores que se irán a Nueva Palmira y que no tienen para el pasaje, que vinieron a pasear y se quedaron sin dinero, aprovechándose de la buena intención de los vecinos”. Engañando “a personas honestas, apoderándose de su dinero”. Acotando el edil “nadie está libre de un día tener que pedir a otro, pero otra cosa es la mendicidad sistemática, día tras día, por las dos veredas y puerta a puerta, como si estuvieran vendiendo un bono colaboración. Es por eso que creemos que estas personas necesitan ser regeneradas en los centros penitenciarios. No pueden salir de pagar una pena a mendigar, porque está reincidiendo en el delito, ya que el engaño es un delito”, remarcó. “Debe existir una comisión a nivel nacional que controle estos casos”. Pidiendo que se aplique la Ley Nº 10071 que en su artículo 1 expresa: “Podrán ser declarados en estado peligroso las personas de ambos sexos, mayores de 21 años, comprendidas en las categorías que enuncia el artículo 2º, cuando su conducta y su estado psicológico y moral, anteriores y actuales, evidencia que representan un peligro social”. Explicando en el artículo 2º “podrán quedar sometidos a las medidas de seguridad” “los vagos, considerándose tales los que no teniendo medios lícitos de subsistencia, no ejerzan profesión u oficio y, siendo aptos para el trabajo, se entreguen a la ociosidad”. “Los mendigos, considerándose tales los que, siendo aptos para el trabajo, se dedicaren -de modo habitual- a mendigar públicamente o, estando inhabilitados por invalidez, enfermedad o vejez, lo hicieren en lugares donde hubiere establecimientos destinados a asilarlos o socorrerlos; y los que vivan habitualmente de la mendicidad ajena, exploten a menores, enfermos o lisiados, o los instiguen a mendigar”. “Los ebrios y toxicómanos habituales, que se embriaguen o intoxiquen en lugares públicos, y aun en lugares privados cuando -en ese estado- alteren el orden y constituyan un peligro para los demás”. “Los proxenetas, sin perjuicio de lo dispuesto por leyes especiales”. “Los que observen conducta reveladora de inclinación al delito, manifestada por el trato asiduo y sin causa justificada, de delincuentes y personas de mal vivir, o por frecuentación -en las mismas condiciones- de lugares donde aquéllos se reúnan”; y por último “los que, requeridos legítimamente por la autoridad, no justifiquen la procedencia del dinero o efectos que guarden en su poder o que hubieren entregado a otros para su inversión o custodia, y también aquellos que, sin causa justificada, oculten su verdadero nombre, disimulen su personalidad, o usen o tengan documentos de identidad falsos u oculten los propios”.
Pidiendo Luis Rico que su inquietud sea trasmitida al Ministerio del Interior. “Que se ponga en práctica esta ley para aquellas personas que se están pasando de vivas”, concluyó el edil.