Ha sido Presidente del Centro Comercial e Industrial de Soriano en más de una ocasión, es de la camada de empresarios que dieron un impulso importante a los cambios a nivel de los comercios y empresas de Mercedes, tiene una industria de reconstrucción de neumáticos, que viene desde su padre y él desde niño estuvo en el negocio, le ha dado proyección nacional e internacional. Hoy reconoce que durante diez años a las empresas les fue bien, pero que no se hicieron los deberes desde el Estado y hoy se están pagando las consecuencias.
Mauricio Labadie también expuso su posición sobre el momento que se vive en ocasión de recibir a delegación de la Agrupación de Gobierno de Alianza Nacional.
Labadie comenzó expresando "estamos en un libertinaje comercial, donde cada una de las personas puede importar lo que se le antoja, al precio que se le antoja, porque los precios están distorsionados, ya sea desde la subvención de algunos países y fundamentalmente el dumping que hay. Tenemos costos altos para producir, competimos con países que denigran el trabajo, caso China y algún país más asiático, estamos en una pelea sin cuartel".
Explicó su caso, "me dedico a reconstruir neumáticos, recupero los neumáticos de transportistas y los distribuyo en todo el país, tengo cerca de 60 empleados, llegamos a tener excepcionalidades desde el punto de vista de aportes al BPS en lo patronal, que nos fue sacado, estamos con energía cara, combustibles para la distribución, caros, imposición alta, productos que entran al país extremadamente baratos y compiten directamente con lo que significa recuperar un producto y nos queda la única esperanza el cuidado del medio ambiente".
En ese sentido dijo, "el neumático es un producto de difícil degradación, nosotros como empresa recicladora, estamos beneficiando al medio ambiente, porque cada neumático que se recupera estamos beneficiando en la emisión de dióxido carbono a la atmósfera. Ahí nos aparece una luz, en comunicación permanente con la DINAMA, pero esto es más una esperanza, una ilusión, algo de donde agarrarse, alguien que desde los 2 o 3 años empecé a caminar en la fábrica que formó mi padre. Tengo un sentimiento industrial, soy industrial y eso es una cosa muy fuerte, perder la actividad donde uno se crió".
Reconoce con "total claridad y certeza que la reconversión es parte del empresario, pero estamos en una momento extremadamente difícil y no veo ninguna línea de juego que me ayude a mejorar mi ecuación.
De todas maneras, también es importante destacar que el Uruguay, fundamentalmente esta región, hemos tenido diez años de un buen desarrollo. No nos podemos olvidar que hemos crecido todos, que a las empresas les ha ido bien, a los comercios también , y que toda la región ha crecido. Vamos a ser justos, pero lamentablemente los deberes no se hicieron como debían haberse hecho desde el Estado. Hoy con ese beneficio que tuvo Uruguay, el país tendría que deber la mitad, no tendría que tener el déficit que tiene y las cosas serían un poco más llevable, y encima el marronazo del clima".
Reconoció que en los últimos tiempos "tuvimos un pequeño alivio, mejoramos algo la competitividad con el tipo de cambio, pero ahora se frenó, hemos tenido la oportunidad que se nos bajen los costos operativos en el tema energético y combustible, y no se nos da. Daría la sensación que todos hacemos los deberes desde el punto de vista empresarial y del trabajador, acá el único que no hace los deberes es el Estado, el único que no piensa en como bajar en serio el presupuesto, es el Estado. Mientras esto siga así, los números van a ser cada vez más complicados, nos vamos hacia abajo.
¡Bajen el presupuesto, actúen para gastar menos, se acabó la fiesta!", concluyó Labadie.