El estancamiento de agua que se presenta en techos del KC 10 de Mercedes, conjunto habitacional del sureste de la ciudad, inquieta a las familias residentes en ese conjunto. El agua contenida es un permanente dolor de cabeza para las personas que desde hace años ocupan ese grupo.
La situación no es nueva, pero ahora se ha generado una particular inquietud entre algunos de los vecinos del sector, considerando la preocupación latente en el país por la llegada del dengue y las recomendaciones que se formulan desde el Ministerio de Salud Pública (MSP) para evitar la acumulación de agua en todo tipo de recipientes y lugares que puedan convertirse en un criadero para las larvas del mosquito transmisor de esta enfermedad, el aedes aegypti.
Dadas las características de construcción del KC 10, en la superficie de los techos de ese conjunto hay un amplio espacio que tiene una altura de entre 30 y 40 centímetros, donde hay una importante cantidad de agua estancada, favoreciendo de esta manera la proliferación de mosquitos, problema que se acentúa en el verano. “Llegan las seis de la tarde y es insoportable”, dijo a @gesor una de las personas residentes en ese conjunto ubicado en la esquina de calles Tomás Gómez y Garibaldi, en la zona de la Escuela 41, en el barrio Túnel. Allí habitan 52 familias que adquirieron sus apartamentos a través del Banco Hipotecario. Al notar hace tiempo la presencia del agua estancada, los vecinos decidieron gestionar ante distintas autoridades una solución, pero esas gestiones no prosperaron, de manera que el problema siguió afectando a los residentes. “Ya no sabemos a quién dirigirnos para que nos escuche y pueda hacer algo para solucionar este asunto de larga data”, dijo el mismo vecino.
Recordamos que las autoridades de la salud han encarando distintas campañas públicas por los medios de difusión, recomendando a la población a desprenderse de objetos en desuso en los que pueda quedar agua estancada, favoreciendo la presencia del mosquito transmisor del dengue, un insecto cuyos ámbitos son urbanos.
Muchos de los recipientes donde el mosquito se cría no son de utilidad (latas, botellas, neumáticos, trozos de plástico y lona, bidones cortados). Estos recipientes deben ser eliminados, se recomienda.
Si los recipientes no pueden eliminarse, porque se usan permanentemente, en ese caso debe evitarse que acumulen agua, dándolos vuelta (baldes, palanganas, tambores) o vaciándolos en forma constante (portamacetas, bebederos, etc).
A nivel departamental, recientemente se cumplió una nueva jornada de descacharrización, ordenada por el Comité Departamental de Emergencias, con el mismo propósito.
El Ministerio de Salud Pública (MSP) ha insistido últimamente en tomar todas las medidas posibles para que estos insectos estén lejos de las personas, recordando que además del dengue el aedes aegypti puede transmitir la enfermedad de chikungunya y el virus del zika. Por ello, se insiste que es indispensable vaciar todos los recipientes o espacios de casas o jardines donde se junte agua, sobre todo agua de lluvia, y evitar que quede estancada.
