En la madrugada de este lunes, alrededor de las 3.00 de la madrugada se notó alboroto en zona de la cárcel de Mercedes, es que el recluso Isidro Walter Cano escapó tras romper una ventana del pabellón en que se encontraba, ganó lo techos, de allí saltó hacia una garita ubicada en la división del perímetro entre la cárcel central y la de mujeres, allí al sentir el cimbronazo en la escalera -que es de metal- la funcionaria (estaba despierta por la intensa tormenta eléctrica y lluvia de ese momento) de guardia se sorprendió y comenzó a gritarle al delincuente que se detuviera, mientras éste prestamente trepaba y saltaba hacia los talleres de la Jefatura, para finalmente ganar la calle por encima del portón que da calle Rodó. La policía en la garita no tenía forma de comunicación, que no fuera su celular propio, es decir que no contaba con equipo de radio y un timbre que existe allí para dar avisos, no funciona, por lo tanto tampoco pudo dar aviso en tiempo de evitar la fuga. El recluso, que reside en el barrio Cerro, en zona de la capilla Pío X, fue detenido allí cuando llevaba consigo a una jovencita, lo que también está investigándose ya que había versiones encontradas.

Esta fuga cuestiona seriamente la seguridad de la cárcel departamental y el funcionamiento de la guardia, lo que debe ser motivo de revisión, ya que el sistema fue burlado fácilmente. Antes los guardias tenían arma larga con municiones de goma, pero ahora no están autorizados a usarlos, por lo que quienes lo llevan y no lo dejan tiene su arma de reglamento, en este caso no fue utilizado como forma de intimidar al recluso. Dentro de estas fallas apuntadas, vale mencionar la actitud del nuevo coordinador de la Jefatura de Soriano, Crio. Insp. Xavier Galnárez quien enterado de la fuga se hizo presente en la Jefatura y asumió la coordinación del operativo de recaptura, yendo al frente del grupo bajo la lluvia intensa de esa hora, consiguiéndose el objetivo, lo que motivó que felicitara a los funcionarios que actuaron bajo esas condiciones inhóspitas en la recaptura del fugado.