Eran las 0.39 de este lunes cuando el celular de @gesor recibe una llamada, era una mujer que nos pide ayuda, "tengo una historia de violencia doméstica y queremos que la cuenten, es una persona allegada a mi, que hoy pudo haber muerto si el padre no llega en el momento justo. Ya se hizo la denuncia ante la Unidad Especializada y hoy seguramente pase todo a la Justicia, ella tiene miedo que no pase nada y que tenga que seguir sufriendo por la presencia de este tipo".
Tomamos en cuenta lo dicho y nos dirigimos al encuentro de la persona que nos contó la historia que sigue y que una vez más pone al desnudo las reiteradas situaciones de violencia que sufren generalmente las mujeres en Mercedes.
Victoria tiene 28 años y una angustia muy grande tras haber sufrido un grave ataque de su pareja que casi la asfixia tomándola del cuello y la soltó cuando el padre de ella apareció en la habitación para ver qué pasaba. Tras siete de meses de convivencia, con violencia verbal desde siempre y física a partir de los tres meses, determinada situación personal familiar le impedía hacer la denuncia, pero este domingo ya no pudo soportar más y se presentó en la Unidad Especializada de Violencia Doméstica junto a su padre y allí su pareja fue citada y quedó detenido y este lunes la Justicia determinará la responsabilidad del hombre, contándose informe del médico forense donde constatan las lesiones y este lunes se completarán otros informes para que el magistrado actuante pueda adoptar decisión en la tarde.
Desde los primeros días de la convivencia en estos siete meses, ella sufrió violencia verbal por parte de este comerciante que aprovechó un momento de debilidad de ella cuando hacía poco que había roto con su pareja anterior.
El la agredía en forma reiterada, la trataba de gorda, inútil, que no servía para nada y no tenía autoestima, a los tres meses comenzaron las agresiones físicas, que dejaban marca en su físico, ella estaba condicionada por una situación personal familiar que estaba tratando de solucionar y no podía hacer la denuncia de lo que le pasaba con su actual pareja.
La controlaba en el horario de salida del trabajo que ella desempeña desde hace ocho años, si demoraba más de 15 minutos, al llegar se generaba una situación de violencia verbal, le controlaba el celular, le hizo cerrar el facebook, no le dejaba tener amigas, tampoco hablar con sus primos, su vida se limitaba a cumplir con el trabajo, y después ayudarlo a él y atender el comercio y luego regresar a la casa.
Durante la convivencia, ella fue enterándose que él mantenía relaciones con su ex pareja y con otra mujer, y cuando ella reclamó por eso, la respuesta fue otra situación de violencia.
La semana pasada ella fue al médico porque estaba angustiada ya que tenía un compromiso importante a nivel personal familiar en el ámbito judicial y decidió ir al médico. El profesional que la atendió le pidió que se retirara el saco que tenía puesto y allí quedo a la vista en uno de sus brazos, importantes hematomas que ella trató de convencer al médico que se los había hecho al golpearse con una puerta y el médico le dijo "no hay puertas que tengan dedos como los que tenés marcados allí", le pidió que no le mintiera y ella terminó contando lo que venía sufriendo. El médico entendió la razón por la que ella no podía hacer denuncia en ese momento y le indicó: "esto no lo puedo dejar pasar, voy a registrarlo en tu historia clínica y llamaré de inmediato al grupo de violencia doméstica" del centro de salud donde se atendió. Allí aparecieron la sicóloga y la asistente social, quienes corroboraron el drama que estaba sufriendo y acordaron que luego del 23 de abril cuando tenía ese compromiso mencionado, debía hacer la denuncia porque iba a terminar mal.
Este domingo, ya desde la mañana ambiente no era el mejor, de todas maneras ella lo acompañó al comercio y a hacer el reparto, almorzaron al mediodía en la casa de la madre de ella, luego él se fue a hacer la caja al comercio y cuando regresó en las primeras horas de la tarde, discutieron porque ella le reclamó que había estado enviando WhatsApp y no precisamente a ella, lo que generó una reacción violenta del hombre que en el forcejeo le golpeó el pómulo y la tomó del cuello para asfixiarla, pudo emitir algunos gritos que determinaron la presencia del padre de ella en la habitación para ver qué pasaba y allí la soltó, aunque siguió la agresión verbal.
Luego se sentó en un sillón frente a ella y le decía "andá a hacer la denuncia que yo voy en un rato", irónicamente.
Ella tomó la decisión y fue a denunciarlo, su padre la acompañó, a él lo mandaron a detener tras los exámenes del médico de forense a ella.
La pareja vive en una casa que el padre le regaló a ella, él salvo en alguna ocasión ayudó a pagar la luz y no pone más nada para la casa, sí le pasa la mantención a la ex pareja, durante este tiempo de convivencia y tal cual el ciclo de la violencia, él reconocía que estaba mal, que iba a cambiar, le pedía perdón, pero poco después la violencia volvía a ser parte de la vida de la pareja.
Este domingo pudo haber sido una tragedia si no aparece el padre de ella, ahora todo está en manos de la Policía y de la Justicia que están trabajando en el tema, para brindarle garantías a esta joven mujer para que pueda recomponer su vida junto a sus seres queridos sin la amenaza permanente de este hombre.