(Por Enrique Lécaille) Además de jugar en la delantera, Manuel López ejerce la labor de tesorero del Club Once Corazones. Este jueves fue el autor del primer gol frente a Nacional, en el último partido del Torneo Apertura. El atacante fue uno de los más felices durante el festejo cumplido en la sede social de Once Corazones tras la obtención del primer certamen de la temporada de la Divisional B del fútbol mercedario.

-Para vos este título una alegría doble, es decir, como futbolista y como dirigente…

“Y sí. Se nos pudo dar. Estoy muy feliz y emocionado porque nuestra labor dentro de la cancha dio sus resultados, pero también como dirigente, porque a mí me toca manejar la finanzas, lo cual no es fácil, porque los números nunca dan en el fútbol nuestro, pero lo importante es actuar con transparencia y colaborar con los compañeros y la institución. Yo creo que ni el más optimista podía pensar esto, pero lo pudimos lograr”.

-Muchos de los integrantes del actual plantel fueron compañeros en el fútbol infantil, también en Once Corazones. ¿Eso ha ayudado a consolidar el grupo?

“Sí, es verdad. Somos básicamente un grupo de amigos. Con Julián y Hernán Arcaus, Ramiro Ordoño y algún otro compañero, como Juan Carlos Castro, tuvimos la suerte desde chicos de estar ligados al club y hoy como adultos estamos viviendo esta gran alegría”.

-El último partido representaba un desafío muy grande, por todo lo que había mostrado Nacional y porque tiene un entrenador exitoso, como Alejandro “Tato” Pacilio…

“Es verdad, y por lo mismo deseo felicitar a Nacional, que fue un durísimo rival. Dejaron todo en la cancha y hasta los últimos 5 minutos eran los campeones”.

-Manuel, los títulos ayudan a que la gente se acerque a las instituciones…

“Sí, desde luego. Habitualmente vos venís a trabajar, a una reunión, y somos cuatro o cinco, nada más, y hoy por suerte hay más de 80 personas festejando en la sede. La idea es atraer la gente, y pienso que este título ayudará a eso. Cuando el club intentó organizarse de nuevo para afiliarse otra vez a la Liga, me tocó vivir ese proceso a la distancia, porque en esos momentos estaba viviendo en Montevideo, pero tenía unas ganas enormes de venir a jugar; por suerte el club pudo afiliarse y yo pude venir a Mercedes, porque solucioné la parte laboral”.