Según la versión manifestada por su empleado fue sobre las siete de la tarde: "venimos a hablar con Mario, le pidieron mi celular, entonces el hombre se va para adentro a buscar el número mío y lo encañaron y lo ataron en la pieza de él”.
Así comenzó su relato Mario Urchipía propietario de “La Pescara", el establecimiento fuera de la planta urbana de la localidad de José E. Rodo que el pasado miércoles fuera copado y robado constituyendo el segundo hecho de idénticas características, ocurrido en menos de siete días en la apacible localidad.
“Si hubiéramos llegado antes no se lo que hubiera pasado -dijo más adelante en su relato Urchipía- quien precisó que su arribo al domicilio “fue sobre las ocho más o menos” dijo, y el panorama fue de destrozos, vidrios rotos, todo revuelto.
“Lo salimos a buscar –agregó- porque mi mujer abrió la puerta y se encontró con todo el panorama entro por el frente y nosotros entramos por el costado por costumbre porque metemos en la cochera el vehículo, se encontró con ese panorama y me pegó el grito no vayas a entrar que capaz que hay gente adentro”, contó.
“Salimos a buscar al empleado y lo encontramos atado en la casita donde vive él con una compañera que tiene. Tuvimos que entrar por una ventana un policía que era flaquito de una despensa que yo tengo que da a la pieza de éste muchacho y lo encontró atado, como el hombre hablaba por lo menos esa vivo”
Si bien no había verificado la totalidad de lo que se llevaron detallo "un TV 42 “la ropa buena se la llevaron y la policía pidió que no tocáramos nada, a mitad de camino entre la casa y la ruta estaba la TV tirada, se ve que cargaron tantas porquerías y el auto era chico”.
Al ser consultado sobre la versión brindada por cuanto a los participantes del hecho Urchipía explicó que el hombre tenía un susto tan grande-refiriéndose a su empleado- "que no supo decirme muy bien cuantos eran, un encapuchado y otros a cara descubierta".
Por último, Urchipía concluyó "alguien está vendiendo las cosas, nadie puede venir de afuera sabiendo que yo no estaba, que venía de comprar una camioneta y el empleado estaba solo alguien está vendiendo. Lo que te puedo decir, es que de un tiempo a esta parte la tranquilidad de este pueblo se terminó".