(por Aldo Roque Difilippo) El Movimiento Nacional de Usuarios de la Salud Pública y Privada realizó su asamblea anual donde además de una evaluación del proceso que viene dándose con la Reforma de la Salud recibieron al futuro Ministro de Salud Pública, Dr. Jorge Basso, y a la Dra. Cristina Lustemberg quien ocupará la subsecretaría. “Pasaron por la Asamblea trasmitieron un saludo, un compromiso de mantener el contacto con los usuarios” comentó Néstor Gurruchaga, Presidente del Movimiento Nacional de Usuarios de la Salud Pública y Privada. En diálogo con Centenario Gurruchaga se refirió al proceso que viene dándose con la Reforma de la Salud, aportando una visión crítica con respecto ya que “hay sectores que siguen altamente mercantilizados, su negocio no es la salud, es la enfermedad”. Por lo tanto “si no existe un fuerte control de parte de las autoridades del Ministerio y de la Junta Nacional de Salud no van a a avanzar en el cambio de modelo de atención”.
En un comunicado de prensa que emitieron hace poco expresaban que quieren reunirse con el futuro Ministro de Salud para hacerle algunos planteos. ¿Por dónde pasan los reclamos del Movimiento Nacional de Usuarios de la Salud Pública y Privada?
-Centralmente pasan por la evaluación que hacemos de la Reforma de la Salud donde sostenemos que de los tres ejes principales, cambio del modelo de financiamiento, cambio del modelo de gestión y cambio del modelo de atención, entendemos que se avanzó bastante en el modelo de financiamiento, es mucho más democrático la forma en que se financia el sistema de Salud, se avanzó un poco en el modelo de gestión; pero donde está el gran atraso es en el cambio del modelo de atención. Porque implica priorizar el primer nivel, es decir prevenir y promover en Salud. Que entre otras cosas es aprender a vivir en salud. Nosotros sostenemos que hay sectores que siguen altamente mercantilizados, su negocio no es la salud, es la enfermedad, y que si no existe un fuerte control de parte de las autoridades del Ministerio y de la Junta Nacional de Salud no van a avanzar en el cambio de modelo de atención.
Hay una declaración que la Asamblea aprobó que es muy importante, que es una consulta al Ministerio de Salud Pública, y a la Junta Nacional de Salud, que consiste básicamente en 4 preguntas: si en el último año Casa de Galicia recibió sobrecuota de inversión. Si la recibió preguntar cuánto es el monto. Además si Casa de Galicia ejecutó las obras para las cuales recibió esa sobrecutora de inversión, y cuál es el organismo encargado de controlar que una institución reciba la sobrecuota y que realmente la aplique a las obras para las que les fue concedida.
Respecto a las Mutualistas del interior, ¿cómo se viene dando esa situación de las inversiones?
-Creemos que siguen habiendo muchos atrasos, que hay poco control, que la sobrecuota de inversión tendría que estar centrada especialmente al primer nivel de atención, y a mayoría de las instituciones las aplican a segundo nivel, y no a policlínica.
La dificultad que nosotros vemos es que la aprobación de esos fondos elude sistemáticamente los organismos donde hay representantes sociales. No pasa ni por la Junasa ni por ninguna Junta Departamental de Salud. Es decir los representantes sociales no tenemos lugar donde poder opinar y discutir. Centralmente se trata de eso, en el eje de las declaraciones tomar como modelo lo que pasó con la Operación Milagro. Es decir que la Operación Milagro demostró que había más de 50 mil uruguayos que no veían porque eran pobres, y cuando uno afirma eso está afirmando una segunda cosa que es decir que si había 50 mil uruguayos que no no veían porque eran pobres quiere decir que hay sectores del sistema de Salud que tienen un negocio muy lucrativo vinculado a ese tema.
Cuando el gobierno uruguayo decidió intervenir, le solucionó el problema a más de 50 mil uruguayos y afectó a aquellos que tienen un negocio lucrativo vinculado al tema.
Ese es un ejemplo de que para profundizar la Reforma de la Salud hay que animarse a afectar otros intereses que siguen estando altamente mercantilizados.
Los usuarios de la Salud Privada se quejan por el tiempo de espera para ser atendidos por especialistas. ¿Ese tema se está dando por la incorporación de muchos usuarios al sistema de Salud o por otros factores?
-Parte por la incorporación de nuevos usuarios, pero el sistema de Salud uruguayo tiene un cuello de botella muy importante: la enorme inequidad que hay en la distribución de recursos humanos. Los tiempos de espera se alargan, y no cumplen los plazos creados por la ley, fundamentalmente en el interior.
Hay algunos compañeros que dicen que para tener todos los servicios al alcance de la mano hay que vivir cerca del Papa. Quieren decir cerca del monumento al Papa que está en Montevideo, donde están las principales mutualistas y los principales servicios. Cuanto más te alejás del Papa más dificultades tenés para resolver tus temas de salud.
Montevideo con el 45% de la población concentra el 73% de los recursos humanos en Salud. Queda un 27% para el resto del país, y de ese porcentaje solamente el 8% está al norte del río Negro. Si en Soriano tenemos algunas dificultades, imaginemos lo que es Rivera, Artigas, Tacuarembó.
En una sociedad de libre mercado donde nadie puede obligar a nadie a trabajar donde no quiere, nosotros sabemos que ese no es un tema fácil de resolver, pero es uno de los temas que queremos discutir con el futuro Ministro cuando nos reciba. Saber cuál es el proceso para cambiar eso, porque si no inician un proceso para cambiarlo, aquello de recibir el mismo nivelo de atención no importa donde vivamos sólo va a quedar en un enunciado teórico.
(*) Nota originalmente publicada en Periódico Centenario.
Fotografía extraída del muro de facebook de Yudith Jaitov Cornelli.