PAMER se quejó por las medidas impuestas por el gobierno argentino indicando que son “inconciliables con el MERCOSUR y su normativa, coartan la libre competencia de nuestras empresas”. La papelera mercedaria expuso la situación que atraviesa debido a las imposiciones desde la República Argentina. En tanto el diputado sorianense Roque Arregui trasladó este tema a la Cancillería y al Ministerio de Economía y Finanzas, pidiendo que fuera estudiado en procura de una solución.
En dicha carta PAMER expresa: “La resolución de AFIP 3373, que entró en vigencia a partir del día 7 de setiembre, agrega un nuevo escollo al intento de poder concretar algún negocio de exportación a dicho país.
La citada resolución, establece que cambios en el anticipo de IVA a las importaciones que no sean destinadas a formar parte del activo fijo del importador y en la retención del impuesto a las ganancias para las importaciones de bienes. La tasa de percepción del IVA de los bienes en general pasan del 10% al 20% y la tasa de retención del impuesto a las ganancias de los mismos bienes del 3% al 6%.
Mientras esto ocurre se sigue profundizando la brecha entre las crecientes importaciones de cartón corrugado argentino por parte de empresas locales y las menguadas exportaciones a ese país. Desde la entrada en vigencia de la declaración jurada de importación el 1 de febrero pasado hasta fin de agosto, las exportaciones argentinas de cartón corrugado a Uruguay bajo los rubros arancelarios 4819100000 y 4808100000, ascendieron a 3.315.645 kgs. por un valor CIF de u$s 4.564.743, mientras que las exportaciones bajo los mismos rubros de Uruguay a Argentina fueron 199.907 kgs. Por un valor CIF 294.763.
Los números son elocuentes por si solos de la enorme disparidad que se ha planteado a partir de las arbitrarias y aleatorias medidas dispuestas por el gobierno argentino. Establecen a esta altura un escollo unilateral casi insuperable en un negocio que dentro del mercado argentino de cartón corrugado, estimado en 800.000 toneladas anuales, resulta irrelevante para Argentina, pero no para Uruguay. Estas medidas, inconciliables con el MERCOSUR y su normativa, coartan la libre competencia de nuestras empresas en el mercado argentino, en cambio no afectan la de las empresas argentinas en el mercado uruguayo. Las desiguales condiciones competitivas que fueran mencionadas en nuestra nota del 12 de junio, se agravan con esta nueva medida.
Todas ellas ponen al descubierto la vulnerabilidad de las empresas nacionales, para las cuales los volúmenes de cartón corrugado que ingresan desde Argentina representan un porcentaje muy importante del cartón corrugado que se consume en el Uruguay, no así a la inversa.La resolución de AFIP 3373, será un nuevo escollo para desalentar aun más las leves expectativas que clientes argentinos podían tener de contar con abastecimientos alternativos, que no los mantuvieran rehenes de la oferta local de cartón corrugado.
Sin pretender ser alarmistas, estos hechos abren un difícil panorama para las empresas productoras locales de cartón corrugado, expuestas a una desigual competencia del exterior la cual no puede ser replicada ya no por factores competitivos, sino por unilaterales medidas, lo que traerá aparejada dificultades económicas y financieras en el futuro”.