A las 8.15 de la mañana Víctor Hugo Morales ya estaba aguardando para votar en el circuito número 163. Mientras esperaba, su presencia no pasó desapercibida, el rumor que “el hijo predilecto” de Cardona había llegado, corrió con rapidez en la Escuela 54. “Te miro siempre por televisión”, le dijo una señora cuando se percató de su presencia, mientras gente de los demás circuitos instalados en el centro docente se acercaron para saludarlo. Hubo quienes se sacaron fotos con él y otros les recordaban a sus familiares que habían sido compañeros de la infancia del relator mientras vivió en Cardona.

Junto a él estaba el conocido rematador Juan Carlos Morales, que votaba en el mismo circuito y con quien mantiene una amistad de años. Se abrazaron, hablaron y hasta quedaron en encontrarse en Buenos Aires para ir a ver un partido de fútbol. “Comes en casa y luego nos vamos al estadio”, le dijo Víctor Hugo.

Entre charlas y saludos, llegó el momento de votar y luego de ello destinó unos minutos para hablar con Centenario, sino antes recordar que la sala de redacción del Periódico lleva el nombre de “Ernesto Díaz Tarela” un profesor a quien siempre recuerda como inspirador de su bagaje cultural.

“Me doy este gusto de mantenerme en contacto con mi ciudad aunque sea de esta manera”, dijo al destacar su regreso al pago cada vez que el pueblo es llamado a las urnas. Víctor Hugo, habló de su presente en el periodismo argentino, de su último libro “Audiencia con el diablo” y del Presidente José Mujica.

“Es infrecuente que exista un hombre que llegue a un lugar de poder tan importante y se mantenga tan fiel a sus convicciones personales”, indicó sobre el “Pepe”. “Esa vida austera, franca, transparente de hacer las cosas, ha sido una marca imposible de alcanzar por nadie del mundo. Nada más que su manera tan altruista de vivir, despojado de intereses materiales, en un mundo tan materialista, habla con mucho más autoridad que todos”, subrayó.

(*) información y foto proporcionada por Periódico Centenario.