(Por Enrique Lécaille) La vida de Washington “Tito” Ultra siempre ha estado marcada en gran medida por el fútbol. Actualmente es comentarista del programa Podium que se emite por Difusora Soriano, pero en su pasado deportivo se destaca su papel como golero del Club Nacional de Mercedes y su actuación como Director Técnico de la histórica selección del Instituto José María Campos que obtuviera el inolvidable título nacional logrado en el Campus de la ciudad de Durazno. La conmemoración de ese torneo ha llevado a organizar una serie de homenajes, como exposición fotográfica que puede visitarse en el propio Instituto y otras actividades programadas para el próximo sábado 22 de noviembre.
-¿Cómo recuerda, Ultra, aquella magnífica coronación, a cuatro décadas?
“Recordar aquello es indescriptible, un título histórico logrado después de un campeonato muy duro y de una eliminatoria bastante larga y sobre todo de una serie final en Durazno que se había presentado muy difícil para nosotros”.
-Siempre se ha hablado mucho en Mercedes del equipo del Instituto Campos que usted dirigió, pero: ¿Cuál era realmente el nivel de aquella selección?
“Nosotros teníamos un plantel espectacular, con una defensa recia, con un buen mediocampo y con jugadores veloces arriba, si bien no había un jugador en particular que soresaliera, pero todos aportaban algo. Teníamos por ejemplo un valor como José Luis Álvarez, que después fue campeón del Litoral con la selección de mayores, pero estaban también, por citarte algunos, Esteban Eízaga, que jugaba en Nacional y que era un crack en esos momentos, un gran goleador, Jorge Gioia en la mitad de la cancha, Carlos Diperna, Mario Chelle, Richard García, zaguero central de Bristol, o Miguel Millán, a quien lo vino a ver Miguel Ignomiriello, quien por entonces estaba dirigiendo a Nacional. Ignomiriello vino para llevarlo a entrenar en Montevideo, pero Miguel no quiso ir. Eso nos consta a todos”.
-Algunos de ellos ya jugaban en Primera División, en los clubes de Mercedes, como José Luis Álvarez, que estaba en Rovers…
“Sí, teníamos a Álvarez que nos aportaba su cuota de experiencia, un jugador con una formación distinta, o el mismo Esteban Eízaga, que, como te decía, jugaba en Nacional”.
-Pero habiendo sido usted arquero, es claro que debe haberse asegurado una pieza clave para esa posición…
“Sí, teníamos a Horacio Reta, que siendo un niño ya jugaba en el primer equipo de Rampla y que tuvo una campaña espectacular con nosotros. Transmitía mucha seguridad”.
-¿Y el nivel de los adversarios? ¿Qué tan bueno era?
“Era un nivel muy alto. Artigas, por ejemplo, tenía un cuadrazo. No te olvides que era la época de Mario Saralegui, Ruben Paz, Manuel Ansorena, que después terminaron jugando en el profesionalismo. Ese departamento era el líder del Litoral, futbolísticamente hablando, pero allá les ganamos uno a cero con gol de Rogelio Chiappini, que era nuestro puntero derecho, y después les ganamos 3 a 0 en Mercedes, con una gran exhibición. Artigas trató de revertir aquello, pero le fue imposible, a pesar de los jugadores de calidad que tenía. Ya en las finales, ganarle a Melo nos costó muchísimo”.
-El paso de los partidos fue generando un eradero fenómeno alrededor del equipo, con mucho público alentando y viajando a todas partes.
“Es muy cierto eso. No sólo iban a vernos los demás estudiantes, sino los padres y mucha gente vinculada al fútbol mayor. Nos siguieron a todas partes. Nuestros jugadores sintieron ese apoyo y eso sin dudas influyó positivamente. Los muchachos se dieron cuenta que estaban muy respaldados”.
-¿Qué escenarios se utilizaron cuando el Instituto Campos debió jugar como local?
“Los últimos partidos de la eliminatoria los jugamos en el Estadio Luis Koster, pero antes habíamos utilizado el Parque Bristol. Siempre con muchísimo público”.
-Luego vino el tramo final en Durazno: ¿Por qué decía hace un momento que esa serie final venía difícil para su equipo?
“Porque teníamos muchos jugadores lesionados y el organizador tenía la ventaja de ser local. Fue un momento muy difícil, especialmente el día de la final. Además ese día hacía un calor impresionante en Durazno, pero teníamos un plantel espectacular y pudimos sacar adelante esa instancia y quedarnos con el título”.
-En aquella época además de ser el Director Técnico usted trabajaba en el Instituto José María Campos, de manera que seguramente conocía muy bien a sus dirigidos, no sólo como jugadores, sino como alumnos a los que venía todos los días en el liceo…
“Sí, yo era funcionario del Instituto Campos desde 1965. Después cuando llegó el momento de formar la selección, los docentes de esos años, el caso de los profesores Washington Lockhart, Eduardo Galagorri o Alejandro Demarco, que era el Director, sabían que yo jugaba al fútbol y me apalabraron. Me preguntaron si me animaba a dirigir y yo les respondí: ¿Cómo no me voy a animar con esta barra? Y era verdad, porque los muchachos jugaban solos”.
-¿Quién le acompañó en el cuerpo técnico?
“Estaba Alberto Martínez, que hoy vive en Montevideo pero que seguramente venga al homenaje del próximo sábado. Pero al margen del cuerpo técnico como presidente de la delegación estaba el desaparecido profesor Mario Prunell, recordado dentista y docente de biología que vivía en Calle Giménez casi Colón, bristolense e hincha de Nacional (que era lo único malo que tenía). Y como delegado estaba también Tomás “Coco” Abreo”.
-¿Cuarenta años después han podido mantener la comunicación entre todos quienes conformaron aquel plantel?
“Con el modernismo de ahora sí. Con Jorge Gioia, por ejemplo, que vive en Chile, donde está a cargo de una empresa muy importante de automóviles, nos comunicamos a diario. Antes, que estábamos a 200 metros, no hablábamos tanto como lo hacemos hoy”.
-El sábado venidero van a poder reencontrarse en persona, a través del homenaje...
“Es increíble que podamos hacerlo y revivir aquello que para nosotros fue inolvidable. Ojalá la gente nos acompañe porque no fue el título sólo del Licepo Campos sino de todo el fútbol de Soriano”.
Programa de homenajes:
Sábado 22 de noviembre
Hora 10: Recepción de ex jugadores, docentes, administrativos, familiares e invitados. Lugar: Instituto José María Campos
Hora 14. Homenaje en el cementerio local a los compañeros fallecidos (Juan Carlos Diperna y Wilson López).
Hora 17.30: Enfrentamiento amistoso entre los campeones nacionales de 1974 y la selección actual del Instituto José María Campos, y posterior vuelta olímpica, en el Estadio Luis Koster.
Hora 22: Reunión de confraternidad en el Club Remeros Mercedes.
Actuación de la Orquesta Municipal dirigida por el maestro Julio De Biase.
Entrega de equipos deportivos nuevos (para los planteles de fútbol, baloncesto y voleibol). Homenaje a dirigentes y autoridades de 1974.