Llegó a Mercedes para participar en la tarde de este martes en la charla informativa sobre la "Baja de la edad de imputabilidad, ¿para que?" organizada por el INAU. La Soc. Mariana González, Directora de la Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo, quien dialogó con @gesor sobre esta temática, recordando que la Institución emitió declaración, señalando que la aprobación de la baja de la edad de imputabilidad "puede vulnerar los derechos de los adolescentes, va contra la normativa internacional de la Convención de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes que Uruguay ratificó y el propio Código de la Niñez y Adolescencia con el voto de todos los partidos y un cambio de este tipo en la legislación habilita que por algunos delitos los jóvenes entre 16 y 18 años se les aplique el Código Penal de adultos, potencialmente puede vulnerar y mucho los derechos de esos adolescentes".
González reconoció que también debe trabajarse en la defensa de los derechos de las víctimas de la inseguridad, "sin dudas, el derecho de las víctimas y el derecho a la seguridad que tenemos todos los ciudadanos de este país, es un derecho que ha sido señalado y que también la Institución ha emitido algunas declaraciones en diferentes momentos como aquel asalto que hubo en una dependencia del Correo en Montevideo donde murió un funcionario policial, también en eso se preocupa la Institución, como a la vez por las denuncias de maltrato policial y la capacitación de quienes deben defender nuestro derecho a tener seguridad".
La directora sostuvo que "no necesariamente el encierro es la única y mejor solución para mejorar nuestros niveles de seguridad, Uruguay tiene porcentaje muy elevado de personas encarceladas y eso no ha mejorado nuestros niveles de seguridad, por lo que debemos buscar otras medidas para eso, que no necesariamente impliquen la privación de libertad porque sabemos que en muchos casos, por más que se está trabajando, tratando de mejorar el sistema penitenciario para adultos y para jóvenes, muchas veces terminan retroalimentando más todavía los niveles de violencia y de inseguridad de las personas".
Considera que debe apostarse "y fuerte" a todo lo que tiene que ver "con la inserción basada en educación, redes sociales que contengan a las personas porque nuestra sociedad como las de todo el continente y el mundo viviendo enormes transformaciones, también en lo que hace a como vivimos las familias, que queremos de la vida, a que aspiramos como bienes de consumo, que está cambiando mucho nuestra cultura y ello también trae problemas nuevos y debemos buscar las nuevas herramientas para poder combatirlos".
Entiende que hay una imagen "peligrosa, que no es buena, ver en cada joven un potencial delincuente es estigmatizar a la juventud y por ese lado no es sano, apostamos a programas que sustituyen la privación de libertad, y que insertan a esos jóvenes en programas de formación, de trabajo, de fortalecimiento personal, porque también pensemos en nosotros mismos y en nuestras familias, y sabemos que la adolescencia es un momento complicado de la vida, nos transformamos muy vertiginosamente y es una edad donde los jóvenes son muy vulnerables haciéndose daños a sí mismo a través del consumo de alcohol, los accidentes de tránsito, los suicidios, pero también vulnerables a la hora de probar los límites y tomando conductas que están al filo de la navaja, en ese momento de la vida, si lo que llega es una pena desproporcionada, lo que estamos haciendo es marcándolo de por vida y hacer que elcamino de retorno a una vida social, integrada, etc. se haga mucho más difícil".