El GEPO (Grupo Especial de Patrullaje y Operaciones) es uno de los sectores más importantes de la organización policial en Mercedes a partir de los cambios que en su momento realizó el actual Jefe de Policía Insp Gral (r) Washington Curbelo Martínez, ello incluyó el cierre de lo que era la sub comisaría 1a en el barrio Cerro, y esa planta edilicia fue destinada al GEPO, es decir que allí tiene su sede el equipo de Radio Patrulla y también la UNO (Unidad de Operaciones ex GEO) pero a su vez también se comenzó a utilizar los calabozos de esa dependencia para alojar reclusos procesados y que plantearon problemas de convivencia en la cárcel departamental, o no es conveniente -según la valoración de las autoridades policiales- que fueran alojados en la cárcel y se ubicaron allí.

En la actualidad hay seis reclusos alojados en dos calabozos y ello sumado a otras dificultades edilicias han generado situación de incomodidad y malestar para los funcionarios policiales y especialmente del personal femenino.

@gesor mantuvo diálogo con agentes policiales quienes confirmaron la información que habíamos recibido "hay un solo baño para uso de policías y también de los presos, que en los calabozos solamente tienen una taza, inclusive hubo varios días en los que no se bañaron y era muy desagradable estar cerca de los reclusos Por lo tanto se autorizó a que se bañen en el mismo baño que usan policías, que además es uno solo y por ende lo tienen que utilizar hombres y mujeres, es decir que la Policía no se preparó para recibir a la mujer como funcionaria, hoy tienen que compartir hasta el dormitorio en ocasiones, lo que es bastante incómodo. En el baño hay water, una ducha y una taza turca".

Consultados los funcionarios sobre si no hay otro baño explicaron "existe otro baño en la cuadra (espacio para descansar) que está con llave porque es para uso del encargado, que no lo comparte, por lo tanto hombres y mujeres, y policías y presos, debemos compartir el mismo baño que además no está en buenas condiciones si no todo lo contrario, la higiene es muy precaria por no decir nula en varios momentos. Aquí hay alrededor de diez mujeres que además tienen dificultades cuando están con la regla (menstruando), no tienen donde ir para estar tranquilas".

También las quejas tienen que ver con otras condiciones laborales "en la oficina de guardia hay solamente dos sillas y una de ellas sin respaldo".

Otro aspecto no menor es que allí hay funcionarios policiales que comparten instalaciones con los reclusos que fueron detenidos por ellos con todo lo que significa y que preocupa porque no se trata de presos circunstanciales si no permanentes y que en muchos casos han ofrecido resistencia para entregarse

Damos traslado y sería interesante que las organizaciones vinculadas a las mujeres como también las comisiones de Derechos Humanos puedan realizar visita al lugar para evaluar la situación y gestionar ante las autoridades los cambios necesarios.