El Intendente de Colonia deberá pasar la Semana de Turismo recluido en el establecimiento de Piedra de los Indios como consecuencia de la decisión de la justicia de desestimar el pedido de libertad provisoria realizado esta semana por su defensa.
El equipo de abogados que asesora al Intendente en suspenso Walter Zimmer presentó a principios de semana un pedido de libertad anticipada luego que el pasado jueves 3 presentara la apelación al dictamen de la jueza Virginia Ginares.
La magistrado de Colonia rechazó el pedido de libertad de la defensa, lo que significa que Walter Zimmer pasará detenido la Semana de Turismo.
“Vale la pena vivirlo”
Zimmer dialogó con los colegas del diario El Observador desde la cárcel Piedra de los Indios. Aseguró desconocer por qué se encuentra preso, e insistió en que la jueza Virginia Ginares “se equivocó feo” en su decisión de procesarlo. Zimmer destacó que dentro de la cárcel Piedra de los Indios, vive una “experiencia positiva” con los presos, “que de otro modo no hubiese podido conocer”. Según describió, ha recibido el apoyo del resto de los 140 recluidos en el centro de detención. Por ese motivo indicó que no está sufriendo su estadía en el centro penitenciario, sino que se lo toma como “unas vacaciones”. Para Zimmer, estar en la cárcel es “una experiencia interesante, imposible de transmitir, intransferible”. “Es lo único que le debo agradecer a la jueza: me dio una oportunidad para vivir en un ambiente que, de no haber sido por este error groserísimo, no hubiese podido conocer. Vale la pena vivirlo”, resaltó. El Intendente coloniense usó el humor para hablar de su situación. “Yo pensaba tomarme un descanso en Turismo, con mi señora, pero lo cambio por este descanso un poco distinto. Es un Turismo especial”, dijo entre risas. En cuanto a su vida en la celda, contó que solo la comparte con el exsecretario de Hacienda de la comuna, José Aunchain, quien además de haber sido procesado por abuso de funciones se le tipificó el delito de falsificación ideológica. Durante los primeros días en la cárcel, en la celda de Zimmer también se alojaban dos procesados, uno por atentado violento al pudor, y otro por asesinato. Sin embargo, el intendente le restó importancia. “Uno había estado con una menor de edad, el otro había efectuado un homicidio de los criollos, de gente de campo”, resaltó. Para matar el tiempo, el intendente de Colonia se dedica largos ratos a caminar por el patio de Piedra de los Indios. Por momentos juega al truco con otros presos, y cuando se aburre lee “Aire libre y carne gorda”, el libro de Ana Ribeiro sobre Aparicio Saravia. También se dedica a escribir anotaciones sobre sus días entre rejas. “Todavía no me he animado a jugar a la paleta, pero quiero bajar un poco de peso”, volvió a reír. “Acá la gente me quiere, están todos como locos conmigo”, aseguró a El Observador, y resaltó la tranquilidad del centro penitenciario. Según su percepción, el afecto que le tienen los presos del establecimiento se debe a que su intendencia firmó un convenio con el Patronato de Encarcelados, para que quienes se encuentran privados de libertad barran la basura, las calles y poden los árboles para juntar dinero. Desde que fue preso, el 28 de marzo, Zimmer recibió visitas de todos los intendentes blancos. Resaltó que del Frente Amplio, el primero en ir fue Marcos Carámbula. Además de los intendentes Artigas Barrios y Óscar de los Santos, el ministro del Interior Eduardo Bonomi lo visitó “como ministro y como amigo”, y espera que la intendenta Ana Olivera también “se aparezca”. “El Ñato (Eleuterio Fernández Huidobro) también va a venir, pero cuando esté mejor de la rodilla”, sentenció, y luego reflexionó: “Ahora es cuando veo con quién uno cuenta, quién está”.
(*) en base a información publicada en el Semanario El Eco de Palmira, y diario El Observador.